“Es la expresión que aquí todavía tenemos una democracia electoral, no una democracia política, y hay algunos que se adjudican la representación de la sociedad civil, en realidad lo que hacen parte es de una tuticracia asuncena con escaso contenido y mucho afán de figuración”, expresó el candidato a la Presidencia por el movimiento Nueva República, Euclides Acevedo, en una entrevista exclusiva para el programa “Fuego cruzado” del canal GEN/Nación Media, acerca del panorama que se vislumbra a siete semanas de las elecciones generales del 30 de abril.

El exministro del Interior y excanciller, que cuenta con el senador Jorge Querey como aliado para la Vicepresidencia de la República, habló sobre el debate presidencial que había sido organizado y posteriormente suspendido por Desarrollo en Democracia (Dende) y otras organizaciones civiles, que cursaron la invitación solo a dos de los 13 candidatos presidenciales, reduciendo el foro a un bipartidismo basado en el formato de EEUU, según alegaron: Santiago Peña del Partido Colorado y Efraín Alegre de la Concertación Nacional.

El presidenciable expresó que no se trata de un enojo personal de su parte, sino que de una demostración de que existe un interés de exponer ante la ciudadanía a solo dos candidatos a ocupar el sillón presidencial para el próximo periodo. “No lo hago por pichadura porque en política el que se picha, pierde. Lo que sí demuestra es que hay una tendencia engañosa, antidemocrática, fraudulenta de querer hacer aparecer ante la ciudadanía que solamente hay dos candidatos y un solo destino, el mismo modelo, el mismo sistema”, cuestionó Acevedo.

El aspirante a ocupar la cabeza del Poder Ejecutivo dijo también que probablemente su presencia o de los demás candidatos incomoda por lo que hubieran expuesto o manifestado en ese debate, por lo que apelan al discurso de la libertad de invitar a quien quieran. “Se olvidan de que la ciudadanía tiene el derecho de escuchar el menú político que ofrecen aquellos que se candidatan. Yo creo que es un descrédito para quienes lo organizaron, le conozco muy bien a algunos de ellos”, manifestó.

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También se refirió a la tan mencionada alternancia que entró en discusión la semana pasada, sobre lo que expresó que no se trata de un cambio de inquilinos, sino de propuestas y el involucramiento de todos los sectores, insistiendo en un gabinete tricolor y de patriotas que trabajen por el país.

“La alternancia es un maquillaje de los procesos electorales y de las democracias sin contenido, y digo yo que lo que se juega en este momento es la definición definitiva de que el Paraguay, o es democrático o sigue siendo una fachada democrática con un pensamiento autoritario que no se ha marchado del todo. Nosotros por eso proponemos en cambio, el cambio no lo lleva a cabo solamente un sector, por eso hablamos de un gabinete tricolor, de un gabinete patriótico, hasta si se quiere decir de una salvación nacional”, apuntó.

Acevedo habló de su propuesta de cambio, uno de ellos es el cambio económico en el sistema de administración de Estado, que Paraguay ya no sea un país que se agota en la exportación solo de carne y soja, a lo que propone una industrialización como un pacto entre los miembros de la producción. En segundo lugar, apuntó al estilo de la gestión política y de acabar con el Estado como negocio personal.

“No puede ser que el Estado siga siendo el pretexto de los negocios personales, primero el Estado y luego los negocios personales. Yo no me opongo a los negocios, yo quiero que todo el mundo tenga plata. Tenemos que cambiar el estilo, tenemos que recuperar la credibilidad de la ciudadanía en la gestión política, y en la gestión política se confía cuando el político no es diferente a los demás y se iguala por la ilustración y la decencia. Terminó el recreo”, sentenció en esta entrevista.

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En cuanto a lo que se refiere a la política social, dijo que hay que recordar que Paraguay es un Estado social de derecho, lo que implica una gestión y gerencia para generar oportunidades de ingreso y circulante, como las obras públicas. En este sentido, señaló que el país necesita de circulante que pueda beneficiar a todos los sectores, a través de la generación de empleo y otras acciones que sean impartidas desde el Gobierno.

“Siempre digo que la gente se olvida que somos un Estado social de derecho, eso supone que el Estado tiene que meterse, tiene que gestionar, tiene que gerenciar, lo cual no quiere decir que tenga que estatizarse, sino que el Estado como un interlocutor, como un animador de la producción. Necesitamos que circule la plata, grandes obras públicas para que el Estado recupere una conectividad perdida, obteniendo lo que no tiene, pero por otra, hacer circular el dinero como, por ejemplo, con una política de vivienda”, manifestó.