Carlos Escauriza, abogado de 45 años y docente universitario, se postula como candidato a senador en la Lista 21 opción 13 del Partido de la Juventud, motivado por hacer el bien a través del servicio e instalar el mantenimiento de la verdad en el Poder Legislativo. En entrevista con La Nación/Nación Media, el profesional destacó que no cuenta con experiencia previa en el campo de la política, pero que sus ganas de cambio lo llevaron a buscar un espacio en el Congreso.

“La política no es para cualquiera, es muy pesada y absorbente, pero yo creo en el individuo y en las libertades de los derechos individuales de hombres y mujeres, por eso me postulé como senador. Aparte, lo que veo en el Congreso no me representa y pienso que tampoco representa a muchos ciudadanos y quiero cambiar esa realidad”, aseguró el abogado.

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Escauriza manifestó, además, que la vara en la política está muy baja y los ciudadanos ya no depositan su confianza o esperanza de cambio en sus representantes dentro del Congreso, por lo cual busca hacer algo por la población y así también evolucionar la clase política. Al respecto, puntualizó que las autoridades ubicadas en los poderes del Estado dirigen el rumbo del país y que tarde o temprano, si uno no participa en la política, esta se mete con todos.

“Para desarrollar el cambio paulatino, mis proyectos legislativos girarán en torno a cuatro ejes centrales, que son la protección de la propiedad privada, la defensa de la familia, el acceso a una educación pública verdaderamente gratuita y el mejoramiento de la calidad de vida de nuestros adultos mayores”, detalló el candidato a senador, puntualizando que los puntos se terminan interrelacionando por un objetivo en común: la garantía constitucional de los derechos básicos.

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Sobre la protección de la propiedad privada, Escauriza manifestó que recae en asegurar los derechos básicos como los bienes materiales e inmateriales para permitir el desarrollo de las personas y sus familiares, llevando de manera consecuente al desarrollo del país. Puntualizó que sin propiedad privada no hay progreso, y para ello se debe priorizar la inviolabilidad de ese principio constitucional.

Con respecto a la defensa de la familia, el abogado afirmó que trabajará en la promoción y protección de los derechos del núcleo familiar, más aún teniendo en cuenta que los mismos se encuentran integralmente protegidos por el Estado, pero falta su garantía. Recordó que la familia es el fundamento de la sociedad y eso debe quedar establecido de manera transversal.

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En el plano académico, resaltó que el acceso a la educación de calidad y gratuita recae sobre las instituciones educativas públicas que, como lo dice su definición, deben estar garantizadas de manera gratuita para cada uno de los jóvenes. “Mi objetivo con esto es lograr que los jóvenes tengan una buena y rápida inserción laboral para que vivan y trabajen con dignidad”, remarcó.

Por otra parte, sobre la protección de los adultos mayores, habló de la importancia de que estos sean amparados y su calidad de vida sea la mejor, conforme a lo establecido en la propia Constitución Nacional. Remarcó que una garantía de la Carta Magna es el derecho a la protección integral de las personas de tercera edad y para lograrlo será indispensable promover el bienestar de las mismas mediante servicios sociales.