En la tarde del domingo 8 de enero, se produjo una invasión a la Corte Suprema y al Palacio Presidencial de Brasil por seguidores del expresidente Jair Bolsonaro que se oponen a la investidura del actual mandatario Lula da Silva. De acuerdo a la opinión de Diego Abente Brun, profesor de la Universidad George Washington, la intención de este grupo era causar un golpe militar, hecho que representa un debilitamiento para la democracia.

“Ellos estaban buscando provocar un golpe militar y sabemos bien que cuando estos golpes se producen, quienes asumen son los comandantes”, indicó Abente Brun en comunicación con la 780 AM. Añadió que los sucesos registrados en Brasil guardan mucha similitud con lo ocurrido en Estados Unidos, cuando adherentes de Donald Trump quisieron impedir que Joe Biden asuma la presidencia.

“El objetivo de estas acciones violentas es tratar de disparar o de gatillar hechos aún más graves, especialmente de la intervención de las Fuerzas Armadas de manera que las mismas reviertan el veredicto de las urnas e impongan un régimen autoritario, eso es clarísimo”, aseguró el profesor y explicó que por este motivo recurren a acciones violentas de modo que se justifique una intervención militar.

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Abente Brun señaló que un error cometido en Brasil fue otorgarle a las Fuerzas Armadas el rol de auditar las máquinas de votación, puesto que no corresponde que dicha institución realice ese trabajo, dado que no es un organismo de observación electoral. “Están buscando que las Fuerzas Armadas intervengan bajo la justificación de que están respondiendo a una demanda popular”, sostuvo.

Los hechos violentos que se desataron en Brasil debilitan no solo la democracia de dicho país, sino también de toda Latinoamérica, afirmó el profesor. “Está siendo atacada (la democracia) de una manera muy rara, extremista, violenta y oscurantista por parte de estos sectores, que son claramente minoritarios, pero que recurren a la fuerza, a la amenaza y a la intimidación para tratar de lograr sus objetivos”, cuestionó.

Abente Brun realizó una comparación con lo ocurrido en marzo del 2021, cuando ciudadanos paraguayos se movilizaron en las calles en contra del gobierno de Mario Abdo debido a la mala gestión llevada adelante en pandemia. Sobre este hecho indicó que esto era una demanda popular respecto a una política pública no satisfactoria y que en dicha ocasión no estaba en juego la democracia.

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No obstante, en este caso el objetivo es evitar que se consagre el resultado de las elecciones, tal como ocurrió en Estados Unidos en el 2020. “La estrategia de los golpistas brasileños tiene muchas similitudes con la de los golpistas norteamericanos”, subrayó.

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