Desde el Tribunal Electoral Partidario (TEP) de la Asociación Nacional Republicana (ANR), liderada por Santiago Brizuela, se informó este lunes que la ministra del Trabajo, Carla Bacigalupo, presentó renuncia a su candidatura para la senaduría con miras a las elecciones generales previstas para el 30 de abril.
De esta manera la radióloga Nieve Soledad Melgarejo, conocida mayormente como “Solcito de la gente”, quien ocupa la dirección de gestión intergubernamental del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), se ubicará en la lista de aspirantes a la Cámara Alta.
“Recibimos hace un rato la renuncia de la ministra y también su solicitud será procesada el miércoles posterior a la proclamación de mañana por una cuestión de orden. Ahora lo que corre es la lista del orden preferencial del movimiento Fuerza Republicana, sector al que pertenece la ministra Bacigalupo. La nómina queda reorganizada de acuerdo a la cantidad de votos recibidos, de mayor a menor y al producirse una renuncia, entonces en ese movimiento se produce la corredera de la lista para arriba y a partir de ahí se determina con la aplicación del sistema D’Hondt”, dijo en una entrevista con el programa “Dos en la ciudad”, emitido por el canal GEN/Nación Media.
Leé también: Conflicto en Brasil toma un nuevo tinte por la comisión de un crimen, según analista
Por otra parte, Brizuela aclaró que la lista de los suplentes permanecerá intacta teniendo en cuenta que la corrida en el puesto de las nóminas se produce nada más con los aspirantes titulares. Según fuentes partidarias, no se descarta que en el transcurso de la semana se presenten más renuncias bajo excusas de conflictos personales, laborares o las bajas chances electorales.
Brizuela indicó también que de registrarse renuncias luego del 4 de febrero, fecha en que se concretará la oficialización de las candidaturas de la Lista 1 ante el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), los cambios en torno a la posición de los aspirantes a cargos electivos para el siguiente periodo legislativo ya no se realizará de acuerdo a los resultados de los movimientos de la nucleación política, sino que se concretará mediante la nómina final.