Este jueves 5 de enero se desarrolla el cuarto día de juicio del caso de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años hijo de paraguayos que murió en el 2020 a causa de la brutal agresión que recibió por parte de un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell, Argentina. Graciela Sosa, madre de la víctima, señaló que exige justicia y espera que los agresores de su hijo reciban la pena más alta.
“Desde un principio esperamos que se haga justicia porque le asesinaron de la manera más cruel, más ahora que estamos escuchando el relato de los compañeros y testigos. Es muy desgarrador, espero que la Justicia le dé perpetua a todos estos, porque fue muy doloroso para nosotros escuchar como padres todo lo que se iba relatando”, expresó Graciela Sosa en comunicación con “Así son las cosas”, programa emitido por Universo 970 AM/Nación Media.
Las declaraciones brindadas en el marco del juicio le hicieron comprender el motivo por el cual nadie pudo salvar a su hijo de la agresión que recibió por parte de los ocho jugadores de rugby. “Fue muy doloroso cómo atacaron a Fernando, acorralaron a todos sus amigos para que nadie pueda defenderlo, ellos fueron preparados para matar”, lamentó la madre.
Así también, cuestionó la actitud de los imputados y de sus familiares, quienes en ningún momento hicieron pronunciamientos manifestando solidaridad o arrepentimiento por lo que sucedió aquel 18 de enero. “En ningún momento bajaron la cabeza, es imposible creer que chicos con la misma edad de Fernando hayan hecho todo eso”, apuntó.
El relato que brindaron los testigos del hecho a lo largo de este juicio es “muy desgarrador”, calificó dado que Fernando ya no podía defenderse, sin embargo, siguió recibiendo golpes y patadas. “Mi hijo ya estaba en el piso de rodillas, levantaba el brazo e implorando piedad y seguían dándole patadas, es muy fuerte, por eso quiero justicia, porque nadie se merece eso”, sostuvo.
Destacan apoyo ciudadano
El caso de Fernando Báez causó conmoción en Argentina debido a la brutalidad con la que se dieron los hechos, y más aún, luego de que se revelaron más datos respecto a los agresores. En la prensa del vecino país se difundieron partes del chat que mantuvieron los rugbiers luego del ataque, donde se burlan de lo sucedido.
También se hizo público que luego de la agresión, varios de ellos fueron a un local de comida rápida con total normalidad y cuando ya fueron puestos a disposición de la Justicia, apuntaron a un inocente como el autor del hecho, el que posteriormente fue sobreseído del caso, pero de todas formas fue convocado al juicio para declarar.
“El acercamiento de la gente, el apoyo que tenemos de todos lados es impresionante, eso también nos da fuerzas de luchar. Ellos (los imputados) quisieron anular el día del juicio, yo estaba preocupada porque ayer habían ido a un cuarto intermedio y en un momento pensé que iban a suspender todo, pero no le concedieron eso”, detalló.
Graciela Sosa afirmó que la muerte de su hijo les cambió por completo la vida, y por ende, esperan que se haga justicia. “De lo que éramos antes no quedó prácticamente nada, éramos una familia muy feliz, muy unida y de un día para otro se nos fue toda la felicidad. Estar sin Fernando es como estar muertos en vida, de por ahí tenés una sonrisa, pero es falsa porque se va en un segundo”, lamentó.