Juan Marcelo Pereira
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Entre los principales retos del próximo gobierno se encuentra concretar la tan ansiada recuperación económica que permita volver a un crecimiento con mejores perspectivas y que puedan ir mejorando los pobres números de la macroeconomía tras enfrentar la pandemia que genera aún graves efectos en las finanzas a nivel mundial.
De acuerdo al análisis de expertos en el ámbito económico, para el siguiente año podría darse un mayor impulso que permita a Paraguay potencialmente crecer con cifras más favorables, pero en la actualidad no pasan de ser pronósticos o perspectivas ante la crisis sanitaria del COVID-19 que continua impidiendo el desarrollo de diversos países llevándolos o manteniéndolos en la pobreza o pobreza extrema con el crecimiento del desempleo, el aumento del endeudamiento público, el alto costo de la canasta básica, entre otros conflictos.
Realizando una evaluación previa a tan solo 4 meses de las elecciones generales presidenciales previstas para el 30 abril del 2023 y con miras a la instalación de la siguiente administración el 15 de agosto del mismo año, el economista José Luis Rodríguez Tornaco, exviceministro de Industria, expuso una serie de desafíos que deberá enfrentar el gobierno entrante en materia económica.
“Sin lugar a dudas el primer gran desafío que encontrará el gobierno entrante será volver a reactivar y encender el motor de la economía paraguaya, que actualmente sigue estancada con un promedio de crecimiento del 0% en estos 4 años y medio de administración del presidente de la República Mario Abdo Benítez. Esto implicó después de varios años la caída del Producto Interno Bruto per cápita, es decir, del pedazo de la torta que le alcanza a cada paraguayo”, explicó.
Reactivación económica
En una entrevista con La Nación, Rodríguez Tornaco sostuvo que una vez reactivada la economía se deberá apostar por generar mayor empleo digno, insistir en el combate a la pobreza, transmitir credibilidad y devolver al Paraguay la previsibilidad, que fue una de sus principales características frente a los demás países.
“La economía se debe reactivar a partir de un componente muy importante que será la inversión privada nacional y extranjera que básicamente estuvo con freno de mano estirado durante estos 4 años por una cuestión de credibilidad. Esto implicará inmediatamente devolver la dignidad al paraguayo mediante las fuentes de empleo que permitan mantener a sus hijos, enviarlos a las escuelas y garantizar 2 comidas por día. Debemos recordar que de acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística 25 de cada 100 hogares en Paraguay no tiene seguridad alimentaria”, remarcó.
Reencauzar la disciplina fiscal
Al respecto, el economista expresó que el tercer elemento para zanjar el grave conflicto económico será reencauzar la disciplina fiscal luego de la instalación del malgasto público que según sus afirmaciones es lo que caracterizó al gobierno de Abdo Benítez durante estos 4 años.
“Tenemos que recordar que se le dio un cheque en blanco cerca de 70.000 millones de dólares de nueva deuda para inyectar y reactivar la economía, pero este gobierno no lo logró, porque priorizó el gasto en actividades que no han tenido el efecto multiplicador esperado como por ejemplo el caso de las obras públicas. Los recursos existen dentro del Estado, pero hoy se encuentra con prioridades probablemente equivocadas por eso la situación social y la calidad de vida de los paraguayos no mejoró”, indicó.
Plan intensivo de viviendas
A los grandes desafíos económicos, Rodríguez Tornaco afirmó que se deberá encarar un plan intensivo de viviendas para la clase baja y media en Paraguay y que tendrá que ir de la mano con una redefinición del financiamiento público, de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) y de los organismos del Estado.
“Esto permitirá incorporar a las familias paraguayas más vulnerables en los procesos de construcción de su propia vivienda, esto asegurará el empleo en las zonas más carenciadas donde ellos van a participar, pero para eso se deberá asegurar el financiamiento”, afirmó.
Señales claras y sin improvisaciones
Asimismo, puntualizó que en todo el escenario de los desafíos será fundamental las señales que puedan enviarse a partir del nuevo gobierno, las cuales deberán ser claras y sin improvisaciones en el manejo de la cosa pública, tras sostener que la administración de Abdo Benítez se caracterizó por el negacionismo al intentar demostrar a la ciudadanía paraguaya que muchas de las situaciones conflictivas que dejarán no eran reales.
“Hoy con los niveles de inflación más altos de los últimos 11 años, con el nivel de endeudamiento más alto de la historia del país con un estancamiento de 4 años y con la pobreza que se implementó luego de 20 años de disminución sucesiva en todos los gobiernos, sin lugar a dudas, estos serán los desafíos de cualquiera de los gobernantes que ganen las elecciones generales”, afirmó el exfuncionario de Estado durante el gobierno del expresidente Horacio Cartes.