Juan Marcelo Pereira, juan.pereira@gruponacion.com.py.
La búsqueda de la calidad educativa continúa siendo una de las principales tareas pendientes en el Paraguay debido a la permanencia de las profundas desigualdades que impiden a los ciudadanos acceder a un derecho básico para la adquisición de habilidades y conocimientos que colaboren a su desarrollo personal.
Actualmente, la ineficiencia en el sistema de la educación golpea con mayor fuerza principalmente a los sectores considerados vulnerables y fue intensificándose en el transcurso de la crisis sanitaria generada por la pandemia del COVID-19, que terminó evidenciando la falta de política educacional.
Realizando una evaluación previa a tan solo 4 meses de las elecciones generales presidenciales que se encuentran previstas para el 30 abril del 2023 y con miras a la instalación de la próxima administración el 15 de agosto del mismo año, Raúl Aguilera, exministro de Educación y Ciencias (MEC), expuso una serie de desafíos que deberá enfrentar el siguiente gobierno en el área de la enseñanza.
“El Ministerio de Educación y Ciencias tiene importantes desafíos para los próximos decenios porque los problemas confirmados sucesivamente no pudieron ser solucionados en las distintas administraciones, tal vez en los últimos tiempos el factor más fuerte haya sido la pandemia del COVID-19 porque nos llevó mucho tiempo reacondicionar el sistema para enfrentar este reto. Nos tomó en todos los niveles educativos, incluyendo también a las universidades. El país no tenía la preparación suficiente como para cambiar rápidamente de la modalidad presencial”, manifestó.
“Grandes cambios”
Al respecto, Aguilera fue contundente en indicar que el próximo mandatario deberá copar la cartera educativa con los profesionales técnicos de amplia trayectoria para hacer frente al estancamiento y retroceso en la educación paraguaya.
“No se podrán hacer grandes cambios si no potenciamos al Ministerio de Educación con un equipo técnico, potente, independientemente a los vaivenes políticos partidarios, que puedan permanecer estables y que se dediquen con exclusividad a los procesos que son claves para el país”, argumentó Aguilera mediante una entrevista realizada por el diario La Nación/Nación Media.
Señaló que al proceso de mejorar la educación paraguaya, “quiérase o no”, se encuentra afectado por la alta rotatividad de los titulares del MEC. “Desde el ‘89 hasta hoy en día tuvimos como 23 administraciones, lo que da un promedio de un año de ministros por periodos, entonces es imposible pensar en proyectos a largo plazo cuando existe una altísima movilidad, una rotación de las personas que dirigen, así como de funcionarios”, manifestó el exministro de Educación perteneciente al exgobierno del presidente de la República, Horacio Cartes.
Agregó que la designación de los técnicos en el MEC, ya sea para el cargo de ministro, viceministros, directores de área en otros, deberá estar acompañada de mayores recursos económicos que serán necesarios para evitar que el próximo gobierno fracase en el campo de la enseñanza.
“Se tiene que asegurar las partidas presupuestarias para las capacitaciones y las infraestructuras, duplicar los montos para la primera infancia. De alguna manera se continúa ampliando la brecha de unos de los problemas capitales que posee la educación paraguaya. Creo que uno de los problemas que deberá ser un desafío tiene que ver con el limitado presupuesto que tiene el ministerio muchos van a decir que se inyectaron más presupuesto, eso es muy cierto, pero gran parte de esos recursos se han destinado para la atención a una deuda con los docentes”, afirmó Aguilera.
Asimismo, comentó que los recursos fueron destinados primordialmente a la construcción del salario básico profesional del docente, donde cada aumento representa más de 10 millones de dólares. “Por supuesto el presupuesto creció en números globales, pero en cuanto al aporte de inversión que tiene que ver con las capacitaciones y con toda la infraestructura no fueron suficientes”, refirió.
El exfuncionario comentó que desde el MEC y algunas mediciones internacionales realizadas internamente que los niños, jóvenes y adultos que se encuentran en el sistema educativo “cada vez aprenden menos, hay un estancamiento del aprendizaje así como de las áreas instrumentales, incluso retrocesos”.
Disminución de la desigualdad
Por otra parte, Aguilera argumentó que entre los principales desafíos figura la disminución de la brecha de la desigualdad argumentando que de cada 10 niños que ingresan al primer grado solo 4 terminan el último año de la educación media y un total de 6 quedan por el camino.
“Debemos ver estrategias para poder enfrentar esto, como ampliar nuestra tasa de ingreso de conclusión de los 12 años de estudio, que recursos utilizar para instalar innovaciones en nuestras instituciones educativas ya que es evidente que con el mismo modelo no estamos teniendo los resultados. Los paraguayos tenemos un serio problema con el proyecto de transformación educativa, en la forma en que se encaro no creo que tenga viabilidad habría que replantear toda la estructura. Ese proyecto que nació en las aulas en el año 1984 y que, a 28 años de su implementación, tuvo avances cuantitativos, más niños y jóvenes en el sistema educativo, pero no hemos podidos atacar el espectro, mejorar la calidad del aprendizaje”, lamentó.
Otros de los desafíos será trabajar gradualmente en un proceso que permita al Ministerio de Educación y Ciencias otorgar una mayor autonomía a sus dependencias, como las escuelas, los colegios para evitar que dependan de un centralismo innecesario. “Se deberá también empezar a buscar un nuevo modelo de gestión, coordinar algunos servicios con los gobiernos municipales y los departamentales, dividirnos bien las tareas y que no hayan superposiciones”, detalló.
Uso de la tecnología
Finalmente, solicitó que el próximo ministro de Educación apueste fuertemente al uso de la tecnología en el proceso para aprendizaje. Al respecto Aguilera puntualizó que el sistema virtual debe ser una de las opciones para impulsar el aprendizaje, construyendo de esa forma un sistema semipresencial donde las condiciones permitan.
“Debemos adoptar medidas creativas, innovadoras, más contextualizadas, pero siempre respondiendo a la educación paraguaya, no importa que la modalidad sea forma, no formal o la informal, al ministerio lo que debe importar es la educación ciudadana en las tres modalidades. Lo que ahora se ve es solamente la educación formal, pero deberíamos apostar por la informal como la radio, la televisión, redes sociales, debemos colocar más alternativas para que los ciudadanos crezcan y desarrollen sus talentos”, dijo.