Ante la culminación del mandato del presidente de la República, Mario Abdo Benítez, el senador Martín Arévalo enfatizó que el Ejecutivo deja a un país sumido en la miseria mientras él sacaba provecho de sus funciones como primer mandatario. “La propia Presidencia de la República está podrida porque Marito demostró ser la cabeza principal de la corrupción en el país, dejando entrever su interés en sacar provecho del Estado al enriquecerse de manera abrupta e ilícita”, sentenció el congresista.
En conversación con La Nación/Nación Media, Arévalo puntualizó que Abdo Benítez incluso llega al extremo de ofrecer maletines, intentando evitar cualquier tipo de investigación sobre sus irregularidades. Así, el parlamentario sentenció que todo está corrompido en el país cuando el propio presidente de la República demuestra estar sumido en una espiral de corrupción, pero que tarde o temprano el primer mandatario deberá responder a las denuncias de enriquecimiento ilícito y tráfico de influencias durante su gestión.
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“Con respecto al enriquecimiento ilícito de Abdo Benítez, evidentemente se debe a su empresa Aldia SA al proveer el asfalto necesario a todas las empresas constructoras que realizaron las rutas, puentes y obras públicas de las que tanto se jacta en su gobierno. El presidente de la República tuvo un crecimiento meteórico en las ganancias de su empresa y las pruebas que lo demuestran son prácticamente irrefutables”, refirió el parlamentario.
Así, afirmó que con cada uno de los factores expuestos se habla de un gobierno absolutamente corrompido desde su propio entorno, donde Mario Abdo Benítez se destaca de ser un jefe de la mafia ante los constantes hechos de corrupción que lo envuelven. Al respecto, el senador manifestó que, consciente del sinfín de irregularidades, el presidente de la República aún busca dejar algún tipo de protección legal para cubrir cada una de sus fechorías.
“Por eso demuestra tanta preocupación en poner a una persona afín a sus intereses como fiscal general del Estado, para evitar investigaciones y no terminar en Tacumbú. Si no contara con este respaldo, realmente no sé cómo hará para aclarar muchos hechos de corrupción que se seguirán presentando en el futuro, involucrando directamente a él; el tiempo será incluso el mejor aliado para exponer más irregularidades que Abdo Benítez consigue tapar por ahora”, aseveró.
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