El alto nivel de endeudamiento en el gobierno del presidente de la República, Mario Abdo Benítez, desatado con mayor intensidad durante la contienda electoral con miras a las elecciones internas partidarias previstas para el 18 de diciembre del presente año, produjo la preocupación en el Poder Legislativo, ante la posibilidad de que los préstamos requeridos sean actualmente innecesarios.
“Estamos viendo con mucha preocupación el último tramo, por las deudas. He visto que para la próxima semana están produciendo tres endeudamientos altos. Ojalá que no sean deudas innecesarias. También nos preocupa la mala utilización de los recursos del Estado, despilfarrando lo que es del pueblo, víveres y medicamentos que se reparten en las campañas políticas”, sostuvo en la radio 730 AM el presidente de la Cámara de Diputados, el liberal Carlos María López.
Al respecto, la Comisión de Presupuesto de la Cámara Baja, presidida por el diputado oficialista Arnaldo Samaniego, emitió días atrás un dictamen favorable para la contratación de tres créditos internacionales por un total de US$ 344.130.000. Dos de estos préstamos serán para el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), institución que ya adeuda US$ 500 millones a empresas vialeras.
Actualmente la economía paraguaya se encuentra en picada ante el aumento del desempleo, del nivel de pobreza junto a la deuda externa contraídas mediante altos créditos para la ejecución principalmente de obras públicas, utilizada como bandera proselitista con la finalidad de posicionar su candidatura para la Junta de Gobierno del Partido Colorado y la chapa presidencial liderada por los exministros Arnoldo Wiens y Juan Manuel Brunetti.
El último tramo de la administración del mandatario está llevando al país a una debacle, Paraguay forma parte de la lista de los países que no logró el crecimiento de su economía luego de superar la etapa más complicada de la crisis sanitaria generada por la pandemia del COVID-19.
La deuda de Abdo Benítez trepa los 14.670 millones de dólares
De los 14.670 millones de dólares en concepto de deuda, 11.812 millones corresponden a compromisos del Estado con los acreedores externos y los restantes 1.819 millones representan la deuda interna, es decir con los proveedores locales.
La mayor parte de los endeudamientos fueron para las obras públicas, donde resultó ampliamente favorecido el bolsillo del presidente. De cifras de compra de asfalto que no superan los US$ 1 millón al año, según las estadísticas registradas en el sistema Sofía de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA), las importaciones del insumo básico en la construcción de rutas de Almacenamiento y Distribución de Asfaltos SA (Aldia SA), empresa declarada por Abdo Benítez, se incrementaron 450% entre el año 2018 y el 2021.