En medio de un proceso penal que lleva años, Aníbal Rodríguez señala que tanto las denuncias en su contra como el procedimiento judicial que prosigue actualmente se encuentran plagados de irregularidades y aparentes hechos de tráfico de influencias por parte de su demandante y de las autoridades fiscales y judiciales de la ciudad de Caacupé.

En comunicación con La Nación/Nación Media, el afectado relató que en su momento había contraído una deuda usuraria y cuando ya no logró pagar las altas tasas que le exigían fue denunciado por estafa de parte del hombre que le había prestado el dinero. En el marco de este proceso, que continúa hasta el momento, Rodríguez no solo ha sufrido el proceso judicial, sino que ahora recibe amenazas de todo tipo.

Rodríguez denunció que el último procedimiento llevado a cabo en el marco de la causa en la que está acusado se actuó de manera irregular, ya que dos de sus vehículos embargados y que eran parte de la investigación fueron sacados del depósito de la Fiscalía irregularmente y ahora son utilizados para campañas políticas del movimiento oficialista Fuerza Republicana, hecho que confirmó personalmente al cotejar los datos del rodado que encontró ploteado con figuras en campaña electoral.

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“No solo decomisaron mis vehículos sin mi presencia o la de mi abogado, sino que además los datos del estado de ambos vehículos fueron adulterados, hicieron figurar como que estaban sin motor y sin otras piezas y posteriormente, quizá en un intento de despistar, los mismos fueron ploteados con promociones de candidatos políticos, pero al darme cuenta de que tenían las mismas chapas, fui a corroborar otros detalles y efectivamente son mis vehículos”, explicó Rodríguez.

El mismo asegura que es más que evidente que tanto los fiscales como los jueces y otros funcionarios se encuentran al tanto del uso proselitista que se les está dando a los rodados que son parte de un proceso penal, ya que en una de las amenazas que recibió de manera anónima le advertían que las personas que están involucradas se encuentran respaldadas por políticos influyentes.

“Yo sé que existe complicidad con políticos, porque en muchos casos pude corroborar y cuento con pruebas del tráfico de influencias que existe en la Fiscalía y los juzgados, y mi abogado ahora está peleando para esclarecer todo esto, pero es importante que la gente sepa lo que ocurre en Caacupé”, sentenció Rodríguez.

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