El representante de la Asociación de Asegurados del Instituto de Previsión Social (IPS), Eduardo Aguayo, manifestó su disconformidad respecto al proyecto de ley sancionado ayer en el Senado de un préstamo de US$ 233 millones. Afirmó que esto perjudicará indefectiblemente a los fondos de jubilados y pensionados, además señaló que hay de un claro interés por estos recursos en pleno periodo electoral.
“Lo que se vislumbra es un nuevo manotazo a los fondos previsionales, desde el primer momento sabíamos que la presentación del proyecto no era más que una maniobra, porque es insostenible que el 5% del presupuesto de salud vaya a garantizar el pago de este préstamo multimillonario, se va a tener que apelar al único presupuesto que genera renta que es el de jubilaciones y pensiones”, expresó el representante del gremio en comunicación con la 650 AM.
Aguayo afirmó que no le sorprendió que la Cámara de Senadores haya sancionado el proyecto, presentado por el diputado Arnaldo Samaniego y añadió que hubo una suerte de “operación” para dar luz verde a este endeudamiento “nefasto y peligroso” para la previsional y el asegurado. “Esto se da en un contexto electoral y nosotros tenemos todas las razones para sospechar que parte de este dinero van a parar a los circuitos electorales”, indicó.
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Los asegurados desconfían de la legitimidad de la deuda y lamentan que ambas cámaras hayan dado el visto bueno a este proyecto, sin antes recurrir a una auditoría del endeudamiento que se adquirió durante la emergencia sanitaria con las empresas proveedoras de medicamentos, el que supera los US$ 400 millones.
“Parásitos históricos”
“Hay una connivencia entre estos políticos que impulsan, entre ellos los Samaniego, que son tildados hasta sus propios correligionarios como parásitos históricos del IPS, por otro lado los miembros del consejo administrativo, empezando por Vicente Bataglia, que fue interpelado por hechos de corrupción y todos los empresarios inescrupulosos que parasitan el ente”, enfatizó Aguayo.
A su vez, lamentó que no se haya recurrido a una refinanciación de la deuda con los recursos propios del IPS, y que la institución no haya apelado a que el Estado salde su deuda con la previsional, el que asciende a US$ 570 millones, esto sin mencionar que existen empresas que adeudan en concepto de aportes al IPS millones y hubiesen sido útiles de modo a no recurrir a un nuevo préstamo.
“Si este préstamo se aprueba por el Ejecutivo va a existir un remanente de la deuda total, mientras se esté pagando el préstamo se va a tener que ver de dónde sacar plata para pagar la otra parte de la deuda. Es un sinsentido completo y uno no puede sospechar otra cosa que existe una confabulación de varios actores para meter manos a los fondos jubilatorios una vez más”, aseveró.