El exministro de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) José Altamirano mencionó que la responsabilidad penal por el ocultamiento de información desde el Poder Ejecutivo respecto al paradero del dirigente liberal y exvicepresidente de la República Óscar Denis, secuestrado hace dos años por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), recaerá finalmente en el jefe de Estado, Mario Abdo Benítez. Por otra parte, agregó también que existe una absoluta orfandad dentro del Gobierno en el tratamiento de informaciones sensibles.
“No será fácil tipificar la figura, decir quién es el autor porque es una cadena de informaciones, el que debería asumir finalmente será el presidente Abdo Benítez, si no encontramos tipificada la acción lesiva en un sujeto identificado”, mencionó.
No obstante, no descartó que la gran afectada sea la excoordinadora penitenciaria Ana Dina Coronel, quien denunció que proporcionó meses atrás la información respecto al lugar de entierro de Denis al exministro de Justicia Édgar Olmedo y representante del Ejecutivo ante el Consejo de la Magistratura (CM) y a Daniel Benítez, exviceministro de Política Criminal y actual titular de Justicia, sin embargo, el dato fue ignorado.
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“De lo contrario, será soltar en la parte sensible, débil y menos transcendente, en la funcionaria de la entidad penitenciaria o cualquier otro nexo, pero no en el verdadero responsable. No será fácil este aspecto”, dijo en una entrevista en el programa “Fuego cruzado”, emitido por GEN/Nación Media.
Negativa en responder a la Fiscalía
Altamirano se refirió también sobre la negativa de las autoridades del Ministerio de Justicia en dar respuestas a las solicitudes de informes realizadas por la Fiscalía con relación al tratamiento que se otorgó a la información proveída por Coronel dentro de la cartera estatal.
“La falta sería doble (por parte de Abdo) porque la obligación de vigilancia es la del presidente de la República, o eligió mal a sus cooperadores, le dio funciones que no han sido capaces de cumplirlas o el cumplimiento de las órdenes recibidas han sido mal ejecutadas. Existe una falta de vigilancia, gente torpe en el ejercicio de las funciones tan delicadas y sensibles”, remarcó.
“No es una cuestión de ocultamiento”
Por otra parte, el exministro de la Corte lamentó la orfandad del Gobierno en cuanto al manejo de informaciones sensibles relacionadas al ámbito de la seguridad y la falta de interés en verificar las información proveída por la exfuncionaria penitenciaria.
“Para mí no es una cuestión de ocultamiento de información, sino una absoluta orfandad en el manejo de informaciones, la falta de oficio, de profesionalidad. Por lo visto las instituciones no tienen asesores expertos, o quienes fungen de asesores no son tales, no es posible que no se otorgue el rastrillaje que merecen estas informaciones tan sensibles para hacer desaparecer toda sospecha”, indicó.