El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, informó este martes al Congreso que se ausentará por cinco días en Paraguay para realizar una visita oficial a España. Esto lo hará en medio de los escándalos que salpican a su gobierno y que colocan en evidencia su falta de liderazgo y la inoperancia de su gestión en materia de seguridad interna que continúa desatando la crítica de la clase política y el repudio ciudadano.
Abdo Benítez partirá en el transcurso de esta tarde del país en compañía de la primera dama, Silvana López Moreira; el canciller Julio Arriola; la ministra de Turismo, Sofia Moniel de Afara; el ministro de Industria y Comercio, Luis Alberto Castiglioni, y el director de ceremonia, Julio César Echague.
Desde la Presidencia aún no dieron a conocer las actividades que mantendrá el jefe de Estado. De esta manera Abdo Benítez buscará tomarse un respiro luego de los graves conflictos que expusieron los privilegios que concede su gobierno a integrantes del grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Todo se inició el pasado martes cuando las exautoridades del sistema de Justicia permitieron el ingreso a la penitenciaría de mujeres del Buen Pastor el féretro del abatido comandante del EPP, Osvaldo Villalba, tras el requerimiento de su hermana Carmen Villalba ante las amenazas de un amotinamiento.
Una semana después, la excoordinadora de Establecimientos Penitenciarios de Mujeres Ana Dina Coronel destapó la olla y reveló que ella y la exdirectora del penal femenino Marian Vázquez gestionaron todo para que la criminal se despida de su hermano por orden del exministro de Justicia Édgar Taboada, orden que fue canalizado por el ahora titular de esta cartera, Daniel Benítez.
A esto se sumó otra denuncia grave que también realizó Coronel contra el hombre de confianza del jefe de Estado, Édgar Olmedo, exministro de Justicia y actual representante del Poder Ejecutivo ante el Consejo de la Magistratura (CM), consiste en que la exfuncionaria le había comentado mediante mensajes de texto hace hace cinco meses que contaba con informaciones respecto al paradero del político liberal y exvicepresidente de la República Óscar Denis.
Sin embargo, la denuncia fue totalmente ignorada por Olmedo. En el transcurso del lunes las autoridades de seguridad encabezadas por el ministro del Interior, Federico González, terminaron por arrastrar al Gobierno a una serie de contradicciones en el intento de justificar una grave omisión de datos sobre secuestrados.
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