El senador del movimiento Honor Colorado Antonio Barrios dijo que aguarda mejores negociaciones para el Paraguay con la victoria del presidente electo del Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, tras sostener que el gobierno de Jair Bolsonaro se caracterizó por ser funcional a los intereses personales y políticos del jefe de Estado, Mario Abdo Benítez.
Al respecto, el parlamentario colocó como ejemplo la fallida negociación sobre el costo de la tarifa de la entidad binacional de Itaipú para el presente año, donde Paraguay terminó cediendo a los intereses del vecino país.
Tras largas negociaciones, finalmente el precio de la tarifa terminó quedando en 20,75 dólares por kilowatt/mes, lo que significó que Paraguay no sostuvo su postura inicial para mantener el precio en US$ 22,60 kW/m, y el valor establecido terminó más cerca del planteamiento brasileño de US$ 18.90 kW/m.
“Realmente Lula fue un buen amigo del Paraguay, contento de que haya ganado. Bolsonaro fue amigo de Marito, pero aún así él no consiguió nada, la tarifa de Itaipú bajó y probablemente vamos a tener grandes problemas con la negociación (Anexo C del tratado de la binacional), pero ojalá que con Lula se pueda llegar a un acuerdo en el que Paraguay siga teniendo beneficios”, mencionó.
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Barrios manifestó que Abdo Benítez aprovechó su amistad con Bolsonaro para atacar políticamente al expresidente de la República y líder del movimiento Honor Colorado, Horacio Cartes, con la finalidad de sacarlo de la arena política.
El colorado detalló que el operativo Patrón, investigación que desató un proceso judicial contra Cartes en el vecino país y que recientemente fue anulado por el Supremo Tribunal de Brasil, formó parte de la estrategia de ambos jefes de Estado contra el también candidato al cargo de presidente de la Junta de Gobierno del Partido Colorado.
“Marito aprovechó la amistad con Bolsonaro. El operativo Patrón, donde el expresidente Horacio Cartes quedó totalmente fuera de responsabilidad, fue armado por Abdo junto con un equipo de Bolsonaro y ahí nació esa operación que le dio tres años y medio de trabajo judicial”, mencionó en una entrevista en el programa “Cara o cruz”, emitido por Unicanal.
Finalmente, lo que se ratificó fue que la ayuda económica que otorgó Cartes al empresario brasileño Darío Messer, condenado por el caso Lava Jato, no representó un crimen ni es competencia de Brasil juzgar una conducta ocurrida en Paraguay.