El economista José Luis Rodríguez Tornaco afirmó que se puso en riesgo el abastecimiento interno de la empresa estatal Petropar, que vendió combustible a YPF de Bolivia a un precio menor, y que se pudo aprovechar ese margen de ganancia disponible para abaratar el valor del carburante en el mercado local. “Lo que está mal es que se haya priorizado la visión comercial de Petropar arriesgando el abastecimiento interno en Paraguay y cobrándole a los paraguayos un precio que podía haber sido menor en lugar de priorizar sus ganancias”, afirmó.
En comunicación con el programa “Tempranísimo” de GEN/Nación Media, Rodríguez Tornaco explicó que, si bien en términos legales, la carta orgánica de la petrolera estatal le permite realizar exportaciones de combustible, se obliga que se priorice el abastecimiento local. “En ese escenario, lo que ha venido ocurriendo durante este periodo es que Petropar se ha comportado como un operador privado, nos han dicho desde un comienzo que no tenían margen para bajar los precios, sin embargo, nos damos cuenta hoy que a los precios a los que negocia con Bolivia son precios que podían haberse trasladado hace tiempo a Paraguay”, aseguró el economista.
Indicó que si Petropar hubiera optado por reducir el precio del combustible, se hubiese evitado las movilizaciones y cortes de ruta que se vinieron dando este año, además de que se hubiera disminuido el impacto en la canasta básica familiar. “Hay que recordar que, hace menos de 15 días, el presidente de la República, Mario Abdo, en declaraciones a la prensa reconocía que Petropar cerró el 2021 con US$ 13 millones de utilidades y que para el 2022, al mes de setiembre, ya tenía casi US$ 30 millones de utilidades, cosa que nadie critica, pero la pregunta de fondo es: ¿Hacía falta que Petropar gane tanto dinero sacando dinero del bolsillo de la gente?”, cuestionó Rodríguez Tornaco.
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Lucro desmedido a costa del pueblo
En este sentido, señaló que Petropar, en lugar de ganar G. 1.200 por cada litro de combustible, hubiese reducido su margen de ganancia entre G. 300 y 500, reduciendo su ganancia, pero abaratando el precio para el mercado local. “El modelo de una Petropar lejos de la gente y más cerca de una visión comercial crematística que golpeó el bolsillo de los ciudadanos”, lamentó. Así también apuntó que la filosofía llevada adelante por la petrolera estatal, la que dicidió duplicar sus utilidades a costa de la gente, ocasionó que, en menos de un año, el precio del combustible se haya disparado a un 43% más que en el 2021.
“Eso se trasladó a la cadena logística, lo que hace que los productos de las góndolas de los supermercados y las tiendas lleguen al bolsillo de la gente con un 20% más caro que en el último año. Eso te habla a las claras que nunca estuvo en su agenda priorizar a la gente, lo que estuvo fue la ganancia, el lucro desmedido”, enfatizó el econimista. “Nadie critica que Petropar pueda ganar, lo que estamos criticando es que se haya comportado con la misma voracidad ganadora de un privado, que es su función, pero siendo un brazo regulador del Estado pudo haber actuado de otra forma”.