Jorge Querey, senador del Frente Guasu (FG) y médico de cabecera de su colega Fernando Lugo, mencionó que se prevé que el exmandatario abandone la próxima semana la unidad de terapia intensiva (UTI). Actualmente, el legislador permanece internado en el Instituto de Rehabilitación y Educación Terapéutica de Fleni, localizado en Buenos Aires (Argentina).
“Si todo va bien, la semana siguiente pasaría del área crítica. Desde la semana que viene es posible que se le lleve a otra área propiamente de rehabilitación de mediano y largo plazo. Neurológicamente está más activo y despierto, interactúa más con sus familiares, es un paso importante”, mencionó Querey.
El expresidente de la República, de 71 años, fue traslado el pasado 7 de setiembre al vecino país. Lugo fue internado inicialmente en Paraguay, el 10 de agosto, de forma inmediata con el diagnóstico de un accidente cerebrovascular isquémico (ACV) y luego fue sometido a una intervención quirúrgica compleja tras la detección de un sangrado en el cerebro. Posteriormente sufrió un sangrado en la zona de la faringe, situación que obligó a realizar una traqueotomía para proteger las vías respiratorias.
Lea también: Gobierno permisivo: sector financiero expresa temor ante el avance de la delincuencia
Aún no se puede valorar su capacidad en el lenguaje
De esta manera el dirigente político permanece hace 9 días internado en Argentina. Al respecto, Querey volvió a manifestar que una de las etapas de lentitud en la recuperación de Lugo consistirá en la desconexión total del respirador para luego someterse al proceso de rehabilitado pertinentemente en la cuestión motriz y sensorial.
“Hay que recordar que aún tiene la traqueotomía y hasta que no se le retire eso no se puede valorar su capacidad en las palabras, de conversación. Muestra señales de mejoría”, puntualizó el médico Querey este viernes mediante una nota con la radio 1080 AM.
En enero del 2012, mientras ocupaba el cargo de presidente de la República, Lugo superó un cáncer linfático detectado dos años antes y del que fue tratado en Brasil. El senador acudió a Colombia para la asunción del presidente Gustavo Petro el pasado 7 de agosto, ocasión en que ya había presentado algunos síntomas de la enfermedad, pero que fueron ignorados por el exmandatario.