El senador Enrique Riera opinó sobre el lamentable suceso que enlutó una vez más a la ciudad de Pedro Juan Caballero. Este nuevo hecho de sicariato, esta vez contra un comunicador de la zona, pone en vilo a las autoridades policiales y, a criterio de Riera, deja en evidencia que los organismos del Estado no funcionan como deberían.
“Lo que llama la atención es la facilidad con que se puede perder una vida cuando los organismos de seguridad no funcionan y curiosamente quienes están al frente de los organismos de seguridad del Estado pertenecen a otro partido político y no precisamente por estar haciendo mérito son permanentemente premiados, cuando debería ocurrir lo contrario; imponer sanciones ejemplares hace tiempo”, dijo a La Nación.
Riera lamentó la indiferencia con que el Gobierno asume su incapacidad de accionar frente a graves hechos de inseguridad. Puso como ejemplo la investigación impecable que llevaron los organismos de seguridad de Colombia luego del asesinato del fiscal Marcelo Pecci.
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“Lo que ocurrió en Pedro Juan parecería como un hecho más, no ves una respuesta rápida del Gobierno, una reacción, sanciones, hay que fijarse lo que pasó en Colombia con el asesinato del fiscal Pecci, por ejemplo, no pasó un mes y los autores fueron identificados, detenidos, juzgados y hoy ya están condenados. Esa es una lección de cómo deberían funcionar los organismos del Estado en Paraguay”, subrayó.
El parlamentario de Honor Colorado dijo que la razón de ser del Estado debe ser la seguridad y que si eso no ocurre, no sirve. “Si el Estado no te brinda seguridad, no sirve, y si el Gobierno no es capaz de lograr la seguridad que el Estado debería tener, tampoco sirve”, refirió. Sin seguridad no hay educación, no hay salud, no hay trabajo, no hay vida, no hay familia”, sentenció.
Justicia “partidizada”
Sobre su opinión acerca de la estructura del Poder Judicial y los nuevos ministros de la Corte, cree que la ciudadanía esperaba más, lamentó que la estructura judicial esté politizada y dejó en claro que cuando se toman decisiones erradas, los resultados no son los más convenientes.
“Veníamos bien, incorporando gente que de alguna u otra manera había demostrado conducta y carácter y después, quienes se llenan la boca de no ‘partidizar’ la justicia, se ha tomado la decisión de incorporar un senador activo de un partido de la oposición con el mismo criterio con que se incorpora la gente de otros partidos a los organismos de seguridad y este es el resultado”, argumentó.
En cuanto a las fuerzas de seguridad, argumentó que sería injusto generalizar porque existen oficiales que se han jugado la vida por un salario miserable, pero sí considera que la Policía Nacional necesita reformas estructurales y profundas que tengan en cuenta una visión integral.
“Donde haya una posibilidad de renovación de hombres y de sistema en los mecanismos de selección, mecanismos de promoción y en los mecanismos de premiación de las conductas que realmente llevan adelante y sobre todo un liderazgo político en la política de seguridad, gente que realmente entienda y que realmente se comprometa. Al crimen no se lo combate desde la oficina, con discurso, hay que entrar en la cancha, hay que jugarse a fondo y hay que trabajar tanto en el sistema preventivo como represivo y esa es una visión integral, una política de Estado”, finalizó.