La Cancillería Nacional confirmó que la Organización de los Estados Americanos (OEA) estará enviando una delegación de Observadores Electorales, cuya misión será dar seguimiento al proceso electoral previsto para el próximo 30 de abril de 2023, día que se llevarán a cabo las Elecciones Generales para la Presidencia de la República, elecciones de representación parlamentaria, gobernaciones y junta departamental.
En un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno nacional presentó la solicitud al secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien, por su parte, confirmó el despliegue de una Misión de Observación Electoral (MOE/OEA) para los comicios generales que se van a celebrar el 30 de abril del próximo año en Paraguay.
En dichas votaciones serán electos, además de un presidente y un vicepresidente de la República, 45 senadores titulares y 30 senadores suplentes, 80 diputados titulares y 80 diputados suplentes. Cabe resaltar además, que durante las elecciones generales, se deberá elegir además 17 gobernadores, 257 miembros titulares y 257 miembros suplentes de Juntas Departamentales de todos los departamentos del país.
Asimismo, conforme al informe del Ministerio de Relaciones Exteriores destacaron la importancia de las misiones de observación electoral como herramientas de cooperación para garantizar la transparencia de los procesos comiciales. De igual forma, recordaron el aporte positivo que las mismas han tenido para fortalecer la democracia paraguaya a través de su acompañamiento ininterrumpido desde el retorno desde 1989.
Cabe recordar que la delegación de Misión de Observadores Electorales se hace presente en diferentes locales de votación, así como un seguimiento de cerca a todo el proceso electoral desde la Justicia Electoral, evaluando incluso los resultados electorales.
Siga informado con: Oficialismo presenta nuevo candidato sin formalizar renuncia de Velázquez
Dejanos tu comentario
Elecciones en Uruguay: Yamandú Orsi y Álvaro Delgado se miden el domingo en un balotaje
Los uruguayos acuden el domingo a las urnas para elegir entre el continuismo del gobierno de centroderecha o el cambio a la izquierda del expresidente José Mujica, en una segunda vuelta que los analistas anticipan muy reñida.
El opositor Yamandú Orsi, un profesor de historia de 57 años, y el oficialista Álvaro Delgado, un veterinario de 55, aspiran a gobernar este país de 3,4 millones de habitantes, considerado la democracia más sólida de América Latina, con un ingreso per cápita comparativamente alto y bajos niveles de pobreza.
Uno de ellos sucederá en marzo al presidente Luis Lacalle Pou, que tiene un alto índice de aprobación, pero está impedido por la Constitución de buscar un segundo mandato consecutivo. Con Orsi, el Frente Amplio apuesta a recuperar el sillón presidencial que perdió en 2020 tras 15 años de gobierno.
Silvia Martínez, una empleada doméstica de 60 años, quiere que gane Orsi porque con el Frente Amplio le fue mejor “en todo” y con la coalición, “en nada”. “Los que estamos abajo somos los que sufrimos más”, dijo a la AFP tras escuchar a Mujica en un club. El exmandatario (2010-2015) tuvo un rol protagónico en la campaña de Orsi como “estratega principal”, según el politólogo Alejandro Guedes.
Leé más: Octubre: envíos de trigo crecieron más de 76.000 toneladas frente al año anterior
A sus 89 años y a pesar de estar recuperándose de un cáncer de esófago, el exguerrillero salió al ruedo para captar nuevas adhesiones. En recorridas y en entrevistas, hizo gala de su estilo de vida austero, que le valió en el pasado el mote de “presidente más pobre del mundo” y criticó a los políticos a quienes “les gusta mucho la plata”.
El delfín de Mujica fue el más votado el 27 de octubre, con el 43,9 % de los sufragios, insuficientes sin embargo para evitar una segunda vuelta. Delgado, exsecretario de la Presidencia de Lacalle Pou, cosechó solo el 26,7 % como candidato del Partido Nacional, pero ahora cuenta con el respaldo de todos los socios de la coalición gobernante, que juntos recogieron el 47,7 %.
“Apoyo a Álvaro Delgado porque considero que es la continuidad de este gobierno, que para mí fue positivo”, señaló a la AFP Manuel Cigliuti, un auxiliar administrativo de 24 años que resaltó el manejo de la economía, la seguridad y la pandemia. “Además, la oposición no está a la altura”, apuntó.
“Escenario muy competitivo”
Los últimos sondeos muestran una leve ventaja de Orsi frente a Delgado. Pero los encuestadores advierten que la diferencia está dentro de los márgenes de error y hablan de un “empate técnico”. “Si bien Orsi ha estado arriba en todas las mediciones, la brecha con Delgado se ha acortado. Es un escenario muy competitivo”, señaló a la AFP el sociólogo Eduardo Bottinelli, director de la consultora Factum.
“El país está dividido en dos mitades” y es “razonable” estimar que la elección se defina por menos de 50.000 votos, indicó. En 2019 se saldó por apenas 37.000. “Pero aunque el triunfo sea por márgenes estrechos no se prevén cuestionamientos al resultado”, aclaró Bottinelli. “Quien pierda lo aceptará pacíficamente y se abrirá una etapa de negociación necesaria entre los dos bloques”.
El diálogo parece inevitable porque ni Orsi ni Delgado tienen mayorías parlamentarias. Tras los comicios de octubre, 16 de los 30 escaños del Senado fueron para el Frente Amplio y 49 de las 99 bancas de la Cámara de Diputados, para la coalición gobernante.
“Tenemos al Senado pronto para salir a la cancha”, prometió Orsi al cerrar su campaña, asegurando tener “gobernabilidad” para impulsar “las transformaciones que el país necesita”. “Vamos a abrir los brazos para llegar a los acuerdos necesarios”, dijo de su lado Delgado, confiado en que “una mayoría silenciosa” le dará la victoria, porque “ni los más opositores” pueden desconocer que hoy el país está “mejor” que en 2019.
Analistas no esperan cambios significativos en la política económica cualquiera sea el vencedor, aunque puede haber diferencias en el comercio, con Orsi más volcado a la región y Delgado buscando mayor apertura al mundo. Ambos candidatos quieren impulsar el crecimiento, en recuperación tras la desaceleración por la pandemia y una histórica sequía. También apuestan a reducir el déficit fiscal.
En el único debate de la campaña, Orsi y Delgado se comprometieron a no aumentar la carga impositiva y a combatir la delincuencia y el narcotráfico. La seguridad pública es la mayor preocupación de los votantes según las encuestas.
En Uruguay, el sufragio es secreto y obligatorio y no existe el voto consular. Para ganar el balotaje no es necesario superar el 50 % de los sufragios, como se requiere en la primera vuelta, sino que basta una mayoría simple.
Fuente: AFP
Dejanos tu comentario
Elecciones en Uruguay: candidatos se comprometen a no subir impuestos
El izquierdista Yamandú Orsi, del opositor Frente Amplio, y Álvaro Delgado, del Partido Nacional que lidera la coalición de gobierno de centroderecha, chocaron el domingo sobre seguridad e impuestos en el debate previo a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Uruguay. Los candidatos se comprometieron a no elevar los impuestos.
Los candidatos a suceder al presidente Luis Lacalle Pou discutieron durante 90 minutos sobre desarrollo humano, seguridad, economía, educación e innovación y trabajo, en una instancia televisada obligatoria por ley antes del balotaje del 24 de noviembre.
Aunque el formato fue esencialmente expositivo, el eje temático sobre seguridad, la mayor preocupación de los votantes uruguayos según las encuestas, provocó recriminaciones mutuas. Delgado, exsecretario de la Presidencia de Lacalle Pou, acusó al Frente Amplio, que gobernó de 2005 a 2020, de “fracasar” en el combate a las “causas y consecuencias” de la criminalidad.
Podés leer: Anuncian un día caluroso, húmedo, con lluvias y ocasionales tormentas
“El 22 % de los que están en las cárceles con delitos graves tienen menos de 26 años”, dijo, y destacó el “respaldo” del actual gobierno a la policía, la baja de los delitos y el “equipo creíble” con que cuenta para seguir en esa senda.
De su lado, Orsi, un exjefe de gobierno del departamento de Canelones que está apadrinado por el exmandatario José “Pepe” Mujica, afirmó que “en Uruguay estamos viendo cosas que solo veíamos en las películas o en otros países de América Latina”, y puso como ejemplo maestras que “les enseñan a sus alumnos qué hacer cuando en la puerta de la escuela hay una balacera”.
“Eso es hoy, no es de hace 15 años. El narcotráfico existe y hay que enfrentarlo”, urgió, y recordó el “escándalo” de la emisión del pasaporte al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, que provocó una crisis política en el gobierno de Lacalle Pou.
Impuestos
El tema impositivo también generó roces. “No vamos a aumentar los impuestos”, aseguró Orsi, aunque Gabriel Oddone, su propuesto ministro de Economía, consideró el mes pasado “irresponsable” afirmar algo así. Delgado cuestionó la promesa de Orsi, y se comprometió a su vez a no aumentar la carga tributaria.
“El Frente Amplio va a subir los impuestos porque lo dice su programa. Nosotros no vamos a subir los impuestos, vamos a generar los estímulos a la inversión y vamos a abrir el Uruguay al mundo con pragmatismo y sin ideología”, aseveró.
Te puede interesar: Detienen a supuesto autor del crimen de un inspector de la Patrulla Caminera
De cara al próximo domingo, los últimos sondeos muestran a Orsi con leve ventaja frente a Delgado ((45-48,5 % contra 41-45,1 %), aunque indican un desenlace incierto dado que las diferencias están dentro de los márgenes de error y sigue habiendo votantes indecisos.
Fuente: AFP
Dejanos tu comentario
Trump empuja al bitcóin hasta los 84.000 dólares
El bitcóin rozó los 85.000 dólares ayer lunes, todavía impulsado por la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Alrededor de las 17:00 GMT la criptomoneda seguía subiendo, hasta los 84.548,06 dólares, tras superar el domingo último el umbral histórico de 80.000 dólares.
El miércoles de la semana pasada había alcanzado la marca de los 75.000 dólares, superando su récord de marzo, que se situaba en 73.797,98 dólares. Las criptomonedas siguen disparándose con el regreso a la Casa Blanca de Trump, que ha prometido desregular este sector, a contracorriente de la política más restrictiva del actual presidente Joe Biden.
El republicano calificaba inicialmente a las criptomonedas como una “estafa”, aunque luego se convirtió en uno de sus defensores y lanzó recientemente su propia plataforma para operar con ellas. Trump también prometió reemplazar a Gary Gensler, el jefe de la SEC, la agencia federal que regula los mercados de valores. Según Stéphane Ifrah, analista de Coinhouse, Gensler “impidió cualquier lanzamiento de nuevos productos relacionados con las criptomonedas sin justificación”.
Lea más: Haití: asume segundo mandatario en 5 meses ante crisis por violencia
Fuente: AFP.
Dejanos tu comentario
Trump nombra a su asesora de campaña al frente del gabinete
Donald Trump realizó su primer nombramiento importante, al elegir a una mujer, Susie Wiles, para el puesto altamente estratégico de jefa de gabinete. El presidente electo también dijo que planeaba hablar pronto con el jefe de Estado ruso, Vladimir Putin. La arquitecta de la campaña del republicano, Susie Wiles, de 67 años, será la primera mujer que ocupe el puesto de jefa de gabinete, como señaló el futuro 47º presidente estadounidense.
“Susie es dura, inteligente, creativa, admirada y respetada en todas partes”, afirmó el republicano, citado en un comunicado. Más temprano, el presidente Joe Biden se comprometió a garantizar un traspaso de poderes “pacífico y ordenado” con Trump, su predecesor (2017-2021) y pronto sucesor en la Casa Blanca.
“Espero que podamos, independientemente de a quién votemos, vernos como conciudadanos y no como adversarios”, dijo Biden en su primer discurso tras la sorprendente victoria del republicano en las elecciones del martes 5. Biden, que este mes asistirá a la cumbre del G20 en Brasil y a la de la APEC (Asia-Pacífico) en Perú, con un desvío por la selva amazónica, pone fin a cincuenta años de vida política con una marcante derrota. Existe el riesgo de que su gestión, sobre todo en materia de diplomacia y medio ambiente, sea destrozada por su sucesor.
Lea más: Milei: “La recesión terminó”
“Retomar contacto”
“Creo que vamos a hablar” con Putin, declaró Trump a la NBC, mientras que Biden, principal apoyo de Ucrania tras la invasión de Moscú, ha cortado lazos con su homólogo ruso. Por su parte, el presidente ruso se declaró “dispuesto a reanudar los contactos” con Trump, que jurará su cargo el 20 de enero. Biden, de 81 años, cedió su puesto como candidato en julio a su vicepresidenta, Kamala Harris. En su bando se acusa al presidente saliente de haber permitido el apabullante regreso de Donald Trump, a pesar de ser presentado como un peligro para la democracia, al aferrarse durante demasiado tiempo a una candidatura sin futuro.
Su portavoz Karine Jean-Pierre, acosada con preguntas sobre posibles arrepentimientos, dijo el jueves que dejaba el tema a los “expertos”, y aseguró que el presidente estaba “orgulloso” de su trayectoria política. En su opinión, Kamala Harris ha sido víctima de una tendencia “global” que ha visto cómo los líderes salientes eran descartados por los votantes una vez que la pandemia de Covid-19 fue quedando atrás.
Lea también: Venezuela solicitó a Interpol la captura de Edmundo González
Trump, “impaciente”
Biden invitó a Donald Trump a la Casa Blanca en una fecha sin especificar para preparar la llegada de la próxima administración, en la que figuras como el empresario Elon Musk y Robert F. Kennedy Jr. (RFK) podrían desempeñar papeles importantes. Trump, que nunca ha reconocido su derrota de 2020 y que rehuyó la ceremonia de investidura de Biden, está “deseando que llegue esta reunión” en la Casa Blanca, según su equipo.
El magnate inmobiliario, objeto de dos intentos de asesinato durante la campaña y acusado y condenado por cargos penales y civiles, tiene 74 días para poner en marcha su equipo de gobierno. Su primer mandato estuvo marcado por una renovación constante de su gabinete de ministros y la sustitución de numerosos asesores caídos en desgracia. A RFK Jr, sobrino del asesinado presidente demócrata y antiguo candidato independiente alineado con Donald Trump, podrían confiársele responsabilidades en materia de salud pública.
Notoriamente crítico con las vacunas, Kennedy aseguró el jueves a la NBC que “no quitaría las vacunas a nadie”, pero consideró que los estadounidenses deberían poder “decidir por sí mismos” si inmunizarse o no. Se prevé que otra figura clave del futuro gobierno sea el multimillonario Elon Musk, muy activo en la campaña a favor de Donald Trump. El presidente electo podría encargar al hombre más rico del mundo la tarea de reorganizar radicalmente la administración federal.
Plenos poderes
Tras haber abandonado el gobierno en medio del caos, en enero de 2021, Trump protagonizó a sus 78 años una increíble remontada al convencer a la mayoría de los votantes de que comprende sus preocupaciones socioeconómicas y de seguridad. Ya triunfante o en vías de serlo en los siete “estados indecisos”, decisivos en la elección, incluido Nevada, según la prensa nacional, el republicano prometió a los estadounidenses mejorar sus vidas mediante recortes de impuestos y aumento de los aranceles aduaneros. China ha advertido que “no habrá ganadores en una guerra comercial” con Washington.
El republicano también dijo que llevaría a cabo expulsiones “masivas” de inmigrantes irregulares. El jueves ratificó que “no había otra opción” en ese sentido. Trump podrá contar con el apoyo del Senado, cuyo control los republicanos arrebataron a los demócratas, y posiblemente con la Cámara de Representantes, donde su partido va camino de conservar la mayoría. Esto le daría, contando la mayoría conservadora en la Corte Suprema, poderes casi plenos.
Fuente: AFP.