Con la denominada tarifa intermedia, que permite la reducción de la tarifa de Itaipú, se beneficia desproporcionalmente en energía barata a Brasil, de acuerdo a las explicaciones de la economista, exministra de Hacienda y actual precandidata a senadora, Lea Giménez. “El que pierde es Paraguay y lo que ocasiona la tarifa intermedia es una reducción de ingresos para la Itaipú de US$ 320 millones, lo cual se dividiría en US$ 160 entre cada país”, indicó la experta en contacto con La Nación/Nación Media.
Para la economista, el gobierno actual le hizo atravesar al país papelones internacionales y resulta difícil calcular el impacto negativo de la mala gestión de la administración nacional frente a Brasil. No obstante, apuntó esperanzada a que la situación se pueda revertir con un primer mandatario que posea el mínimo interés en hacer las cosas bien y priorice los intereses del país.
“Ahora, me parece poco ético vender una cortina de humo, maquillando una mala negociación, al hablar de reducción de la tarifa de la Ande. Desde el 2019, cada paso que da este gobierno es una metida de pata; si bien no perdimos la guerra, nos han robado las armas para pelear y terminar bien parados frente a la potencial revisión del Anexo C”, detalló la exministra, reiterando que solo Brasil y la campaña política del presidente brasileño Jair Bolsonaro se benefician con la tarifa intermedia.
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Contexto de la deuda de Itaipú
Giménez detalló que Brasil logra su objetivo de reducir la tarifa, debilitando así la posición de negociación de Paraguay frente a Brasil en la potencial revisión del Anexo C de Itaipú del 2023. La expectativa era que la tarifa se mantenga en US$ 22,60 Kw/mes hasta el 2023, año en que a deuda de Itaipú se reduce a cero. Con deuda cero, mantener la tarifa nos daría un potencial ingreso de aproximadamente $1.000 adicionales que podría llegarnos a través de los gastos sociales y ambientales.
“Para el 2023 se habla de la revisión del Anexo C, revisión que no es obligatoria para las partes. El Anexo C habla de que la tarifa baja cuando los costos bajan. Sin embargo, a través de los años, aun cuando los costos han bajado, la tarifa se ha mantenido. Esto se logró gracias a la negociación del incremento gradual de los gastos sociales y ambientales, los cuales benefician principalmente a Paraguay”, explicó Giménez, agregando que, aunque no está escrito, el componente político y la capacidad negociadora de los administradores de turno es clave para que el resultado de estas negociaciones continue siendo favorable para Paraguay.
La economista explicó además que la disminución de la deuda de Itaipú resultó en una reducción de costo de US$ 600 millones. Si se mantenía la tarifa como venía prometiendo el Gobierno, esos recursos ingresarían a Itaipú y cada dueño recibiría US$ 300 millones. Sin embargo, con la reducción de tarifa que se dio, Itaipú va recibir solo US$ 280 millones de dólares y cada dueño recibirá US$ 140 millones, perdiendo así US$ 160 millones.
Giménez expreso que “el gobierno miente cuando dice que consiguieron negociar US$ 220 millones a favor de Paraguay: US$ 80 millones de los $220 millones ya eran parte de nuestros fondos para gasto social y los US$ 140 millones restantes fueron parte de una negociación anterior. Al perder $160 millones por no poder mantener la tarifa, el gobierno se vio obligado a crear una cortina de humo para engañar a la ciudadanía con un supuesto beneficio”. Agregó que la factura de ese beneficio prebendario otorgado groseramente a puertas de las elecciones lo va a pagar Hacienda, es decir todos nosotros.
Por otra parte, la economista contó que, en 2016, por primera vez en la historia de Itaipú, se logró sacar adelante la política energética de Paraguay durante el gobierno de Horacio Cartes. Esta política plantea una gestión con visión estratégica de un recurso fundamental para el país. La idea era aprovechar mejor nuestros recursos energéticos para potenciar nuestro desarrollo como país; no obstante, esta iniciativa de central importancia para el país fue ignorada y descontinuada por el gobierno actual.
“En este gobierno no hicieron absolutamente nada y lo único que se logró desde el 2019 es hacernos pasar vergüenza a nivel internacional. Es importante recordar que, antes de que este gobierno cumpla un año ya se exponía al país a una primera crisis política como resultado del acta secreta y entreguista de este gobierno”, recordó Giménez.
“En el 2021, cuando debían de ir a acordar la tarifa para el 2022, el Presidente de la Republica y su comitiva regresaron al país con el rabo entre las piernas porque no saben sumar y restar. Para no perder la costumbre de hacer mal las cosas, el acuerdo de tarifa al que llegó este Gobierno, además de ser desfavorable para Paraguay, llega un año tarde”, terminó.