Desde la Dirección de Migraciones, encabezada por Ángeles Arriola, mencionaron que el ingreso del pastor José Insfrán, quien se encuentra prófugo luego de ser sindicado como líder de una organización dedicada al tráfico de drogas, se debió a la omisión por parte de una exfuncionaria de la institución.
María del Carmen Getz es el nombre de la exfuncionaria, quien fue contratada por la institución y a quién se le escapó la alerta roja contra el pastor prófugo, la misma ya fue desvinculada y puesta a disposición del Ministerio Público.
“La desvinculación se realizó el día de hoy porque hasta ayer ella seguía declarando, hemos hablado con el fiscal y me indicó que ya tenía todos los datos y que iba a proceder después (convocatoria para prestar declaración). El acta de Migraciones donde ella declara ya fue entregado al fiscal Denis Young Park”, dijo Arriola en entrevista con el programa “Apunto”, emitido por canal GEN/Nación Media.
Un informe de la Dirección General de Migraciones divulgado en el programa “30+”, emitido por canal Trece reveló que el pasado 8 de julio ingresó al territorio paraguayo Insfrán. El mismo figuraba como “tripulante” y se encontraba de regreso de la Argentina. El ingreso se produjo a través del puesto migratorio ubicado en Clorinda.
La funcionaria de Estado agregó también que la implicada argumentó “no recordar” que le haya saltado dicha alerta, pero que el sistema es totalmente auditable, por lo que, se podrá demostrar el momento en el que se originó el aviso y todos los procedimientos que realiza cada funcionario.
“Ella no recuerda haber visto la alerta, no recuerda haber atendido al señor, pero se le mencionó que con su usuario le saltó una alerta. Acá más allá de la declaración hay que tener en cuenta el peritaje que se tiene que hacer al sistema y al equipo eso es muy importante. No se descarta que estén involucradas más personas, hay que seguir y encontrar hasta la última persona que haya tenido complicidad con esto”, sostuvo.
“Hay que descartar un encubrimiento”
Por otra parte, Arriola sostuvo que es ilógico pensar en el encubrimiento por parte de una institución, para luego sostener que puso su cargo a disposición, y es el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, quien toma la decisión.
“Hay que descartar también el tema de un llamado o un encubrimiento porque sería muy ilógico dejar por sentado una confabulación. No tengo una explicación al respecto (del porque Insfrán haya tomado la decisión de ingresar al Paraguay mediante los canales legales), tenemos un montón de frontera seca y esto hace pensar muchas cosas, pero quedaría a manos de los investigadores, ya pusimos nosotros a disposición de la Fiscalía todos los elementos para esclarecer esto. Es ilógica la teoría de una orden o complicidad dejando una prueba”, puntualizó.
Arriola descartó también la posibilidad de que el sistema de control haya sido vulnerado, teniendo en cuenta que la alerta no es manejada por la Dirección de Migraciones, sino proviene de manera directa desde la Organización Internacional de Policía Criminal o Policía Internacional (Interpol).
“Migraciones como tal no puede evitar o evadir esa alerta. Esto es una consulta, es colocar todos los documentos y esos datos se van transfiriendo a la base de datos a Interpol. Nosotros no tenemos una intervención en este sistema, no tenemos injerencia en la respuesta de Interpol porque esto es algo automático”, expresó.
Antecedentes
Hay que recordar que Insfrán, pastor de la iglesia protestante Centro de Convenciones Avivamiento (CCA) de la localidad de Curuguaty, departamento de Canindeyú, es uno de los acusados en el marco del megaoperativo A Ultranza Py, impulsado de forma conjunta por el Ministerio Público, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y la Policía Nacional, con apoyo de organismos internacionales.
La investigación de las autoridades sindican a Insfrán como líder de una organización criminal dedicada al narcotráfico y al lavado de dinero, sobre todo por el envío de importantes cargamentos de cocaína a Europa. Con el paso de los años y tras haber ganado terreno en el mundo del tráfico de drogas, se convirtió en líder del llamado clan Insfrán, montando una importante red como parte del esquema para envío de cargamentos de cocaína.
El pastor era afín al gobierno, ya que tenía contacto con importantes autoridades, entre ellas el propio vicepresidente Hugo Velázquez o el exdiputado Juan Carlos Ozorio, entre otros. En otras fotografías se lo ve compartiendo también con el presidente Mario Abdo Benítez y otros políticos.
Tras saltar estos datos durante el operativo A Ultranza Py, se ordenó la captura internacional de José Insfrán, aunque el mismo logró mantenerse oculto y en calidad de prófugo de la justicia. Su salida y reingreso al país dan cuenta de que, a pesar de esta situación, tuvo la posibilidad de moverse libremente por suelo paraguayo sin ser detenido por las autoridades.