Hace meses que el oficialismo y parte de la oposición busca enjuiciar a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez. Este lunes, en un tercer intento por sacarla del Ministerio Público, esperan juntar los votos necesarios que les permitan poner a una persona afín a sus intereses y contraria al expresidente Horacio Cartes, y su movimiento, Honor Colorado.
En las alocuciones, prácticamente no hacen referencia a Sandra Quiñónez, solamente se enfocan en Horacio Cartes, el adversario político más relevante para el oficialismo y la concertación, atendiendo al claro favoritismo que mantiene, hace meses, en todo el país como candidato a la Junta de Gobierno de la ANR, cargo también pretendido por el actual presidente de la República, Mario Abdo Benítez. Así como la chapa presidencial de Honor Colorado, Santiago Peña y Pedro Alliana.
El objetivo es poner a una persona afín para golpear a HC y precisamente, en la línea de sucesión se encuentra Lourdes Samaniego, fiscal adjunta y esposa de Hugo Velázquez, precandidato a presidente por el oficialismo y a decir de la propia Samaniego, uno de los impulsores del juicio político a Quiñónez.
Este lunes se supo que Hugo Velázquez mintió al decir que su esposa había renunciado al cargo de fiscal adjunta tras 30 años de servicio para acompañarlo en su campaña política. Sin embargo, habría intentado encubrir su participación en un acto proselitista -prohibida para funcionarios del Ministerio Público- y también ganar tiempo para posicionarla en el cargo. El hecho, divulgado en mayo de este año- ya había levantado las sospechas de la ciudadanía.
Hoy se supo que Samaniego solamente pidió permiso pero que sin embargo sigue siendo fiscal adjunta y sigue en la línea de sucesión de Quiñónez, cargo que ella misma reconoció que anhela en una entrevista emitida por C9N.
“El próximo escalón dentro de mi carrera sería la Fiscalía General del Estado o la Corte Suprema de Justicia. En algún momento lo pensé, pero sinceramente entre lo que es el rol de fiscal general del Estado y ser ministro de la Corte, yo me quedaría con ser fiscal general del Estado”, afirmó en diciembre del año pasado al programa “Implacable”.
Justificó su interés por la FGE al señalar que “es tremendamente importante en el país”, por lo que enfatizó que si tuviera que optar apostaría por este cargo dentro de su carrera en la Función Pública.
Su aspiración
Samaniego dijo que su aspiración nació hace varios años, pero por cuestiones políticas postergó su deseo de ascender a dicho puesto. Adelantó que cometería una infidencia al señalar que en una ocasión analizó la posibilidad de dar ese paso junto con su esposo, cuando este se desempeñaba como presidente de la Cámara de Diputados.
“Yo hablé con Hugo y le dije, me voy a presentar para ser fiscal general del Estado. Ya varias veces tuve que deponer mis intenciones, pero creo que llegó el momento, le comentaba yo”, recordó y precisó que se vio obligada a deponer sus aspiraciones cuando Velázquez le manifestó su intención de continuar con su carrera política, apuntando a la Vicepresidencia de la República.
“En ese momento si yo me candidataba para fiscal general del Estado, obviamente él tenía que menguar en su carrera. Él deseó ya ser presidente de la República después del señor Horacio Cartes, pero no se dio. Yo tuve que menguar en ese momento”, mencionó al asegurar que fue una decisión difícil para ella declinar de su postulación.
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