El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, en su informe de gestión del cuarto año de gobierno habló sobre la lucha contra el crimen organizado, mientras el propio vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, y su gobierno son salpicados por vínculos con el Hezbolá.
El mandatario resaltó en su informe el enfrentamiento a las organizaciones delictivas, olvidando que dos ministros fueron destituidos de su gobierno por vínculos con el narcotráfico, Arnaldo Giuzzio y Joaquín Roa, y un diputado oficialista preso por también tener vínculos con el narcotráfico, en este caso Juan Carlos Ozorio.
“Nuestra oposición al terrorismo y la delincuencia organizada ha redundado igualmente en otras medidas exitosas. En el marco de las 600 expulsiones realizadas del país por este gobierno se encuentran personas sindicadas de formar parte de grupos criminales con fuerte presencia territorial en la región como el Primer Comando Capital, el Comando Vermelho y otras facciones, contándose 130 personas en este presente año, en las cuales se encuentra el caso del líder regional del grupo terrorista internacional Hezbolá”, dijo Abdo Benítez en parte de su exposición.
Mientras el jefe de Estado da este discurso de logros, el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, es vinculado con la organización terrorista Hezbolá, no solo a nivel nacional, sino internacionalmente se habló y se apuntó al segundo del Ejecutivo por los nexos con el encargado de asuntos internacionales Nawaf al-Mousawi, parlamentario libanés. Además, Velázquez aparece en fotografías con el imán Salid Ali Hijazi del Hezbolá, sobre quien el propio vicepresidente dijo que se trataba de un cantante de mezquita.
Avión venezolano-iraní
Abdo Benítez se jactó de la colaboración internacional que realizó Paraguay en el caso del avión venezolano-iraní retenido en Argentina ante las sospechas de que la tripulación contaría con vínculos con la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán, que pasó por el país sin que las autoridades se hayan percatado de la peligrosidad de los tripulantes, admitiendo que de acuerdo a las informaciones de organismos de seguridad internacional, señalaron a los tripulantes como miembros de una organización terrorista.
“En esa inclinación firme contra el terrorismo, recientemente colaboramos para determinar las irregularidades y circunstancias sospechosas del arribo de un avión y su tripulación venezolana-iraní cuyos integrantes son señalados de haber participado en el transporte de armas en el marco del terrorismo islámico, según revelan los informes de organismos internacionales de investigación”, dijo el presidente de la República.
También resaltó que se realizó una denuncia penal sobre el caso al Ministerio Público para llegar a los responsables o involucrados; sin embargo, olvidó mencionar que días atrás él mismo admitió la inutilidad de los controles de su gobierno con relación al crimen organizado y al terrorismo, asumiendo que se deben implementar cambios en los sistemas de control de la Dinac, de la Dirección de Aduanas y Migraciones.
“Este sospechoso evento que hemos seguido en colaboración con agencias de inteligencia fue alertado a los países afectados por el recorrido de la aeronave con la misma tripulación, además hicimos una denuncia penal por financiamiento y asociación terrorista con la esperanza de que el Ministerio Público determine las responsabilidades de todos los potencialmente implicados”, sentenció.
Crimen organizado y narcotráfico, A Ultranza
Otro de los puntos abordados por el presidente fue las operaciones para desbaratar al narcotráfico y el crimen organizado, resaltando un golpe millonario al tráfico de drogas, en el país que llegan a los US$ 800 mil y 7 mil toneladas de drogas incautadas, sin citar que uno de sus ministros, nada más y nada menos que del Interior Arnaldo Giuzzio, fue destituido por supuestos vínculos con un narcotraficante.
“El enfrentamiento a estas manifestaciones delictivas es infructuoso sin un abordaje integral que involucre a todos los órganos de seguridad, cuestión que este gobierno tuvo claro desde sus inicios”, dijo Abdo.
También habló del megaoperativo A Ultranza PY, que involucró desde políticos a líderes religiosos, sin citar que uno de los involucrados fue diputado oficialista que respondía a su sector político, el exdiputado Juan Carlos Ozorio.
“A Ultranza encierra y representa de cierto modo los tremendos esfuerzos que se realizaron en este último año de gestión en el que tras casi mil operativos se desplegó el más alto operativo de toda la historia del Paraguay. Un sofisticado conglomerado de empresas que por años pasó por debajo del radar gubernamental y que involucra a traficantes, supuestos empresarios, políticos, proveedores del Estado, líderes religiosos, cooperativistas y personas vinculadas al mudo del deporte”, apuntó.
El crimen de Pecci
Abdo Benítez también nombró al fiscal paraguayo Marcelo Pecci, asesinado en manos del crimen organizado en Colombia el pasado 10 de mayo, sosteniendo un discurso de lucha frontal contra estas organizaciones delictivas, crimen que manchó su gobierno con ser el primer fiscal asesinado por la labor que realizaba.
“Si queremos honrar verdaderamente la memoria del fiscal Marcelo Pecci, víctima de sombrías fuerzas criminales, más allá de que se pudo capturar y condenar a algunos de los responsables, gracias a nuestros esfuerzos colaborativos con el gobierno de Colombia, resulta necesario que pongamos en práctica una idea constitutiva del Estado de derecho. La aplicación de la ley penal es innegociable”, afirmó.
Los secuestrados
El presidente Mario Abdo también se refirió a los secuestrados por el grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) que azota al norte del país, sosteniendo que se redoblan esfuerzos para devolverlos a sus familias, mientras tantos las familias de los secuestrados claman por la asistencia e interés del Gobierno para localizarlos.
“No olvidemos como garantes de la ley, que de alguna forma, somos todos funcionarios que tenemos una angustiosa deuda por saldar. Edelio Morínigo, Félix Urbieta y Óscar Denis siguen permaneciendo lejos de su familia a causa de motivaciones criminales, por lo que estamos reforzando la cruzada nacional para retornarlos e impedir en el futuro que otros paraguayos sean arrebatados de los suyos”, expresó Abdo Benítez.