En un artículo de opinión publicado por el medio argentino Clarín y firmado por Eduardo Van Der Kooy, se vincula al vicepresidente de la República de Paraguay, Hugo Velázquez, con el Hezbolá, haciendo también referencia al caso del avión venezolano-iraní, detenido en Argentina, con 19 tripulantes, 14 de ellos venezolanos y 5 iraníes. La columna se refiere a los conflictos y posicionamientos de la vicepresidenta argentina Cristina Kirchner sobre el presidente de la República de ese país, Alberto Fernández.

Si bien, la nota menciona varias otras situaciones, también habla de un “temor en forma de interrogante” en el Instituto Patria, sobre el escándalo que generó no solo en Argentina, sino también en Paraguay y Uruguay el avión carguero con la matrícula YV3531, demorado en Buenos Aires, el 6 de junio, también se cita que Velázquez fue “observado” por esta escándalo en Paraguay.

“La deficiencia de nuestro país contrastó con la rápida reacción de Uruguay y Paraguay. Pero tampoco reluce todo. En Asunción quedó observado el vicepresidente Hugo Velázquez. Supo en otro tiempo ser fiscal en Ciudad del Este. Se le atribuyen nexos, que niega, con el grupo Hezbolá. Es probable que la historia del avión, si no se tapa, recién esté empezando”, refiere parte de la nota.

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Así también, se menciona cómo pudo haber pasado desapercibido, Gholamreza Ghasemi, el piloto del avión carguero, teniendo en cuenta que en Triple Frontera se cuenta con máquina lectora de huellas dactilares que opera la Policía Aeronáutica que se encuentra a cargo de la Gendarmería Argentina.

“Entre que el Gobierno se percató de la presencia de la máquina y se confirmó que uno de los pilotos era, en efecto, miembro de la Guardia Revolucionaria Quds se perdieron nueve días. Los que demoró el FBI en enviar la información. La Argentina dispone en Ezeiza de una máquina lectora de huellas dactilares que opera la Policía Aeronáutica. Otra está en la Triple Frontera a cargo de la Gendarmería. ¿Por qué no se activaron para corroborar que Gholamreza Ghasemi era quién es? ¿Inoperancia o complicidad?”, cuestiona la columna de opinión firmada por Van Der Kooy.

Mientras tanto, a nivel nacional e incluso internacional, explotó el escándalo de un supuesto vínculo del vicepresidente de la República y precandidato a la Presidencia para el 2023, Hugo Velázquez, con miembros del Hezbolá. Velázquez aparece en fotografías con el imán Salid Ali Hijazi del Hezbolá, sobre quien el propio vicepresidente dijo que se trataba de un cantante de mezquita.

El imán Salid Ali Hijazi del Hezbolá, quien no solo aparece a lado del vicepresidente Hugo Velázquez en fotografías difundidas por medios locales y extranjeros, sino que también fue captado dirigiendo el importante homenaje a Qassan Soleimani en Beirut, capital del Líbano, donde participó Hassan Rouhani, presidente de Irán en ese entonces, así como la hija del fallecido general iraní, quien comandaba también a las fuerzas del Hezbolá en Siria e Irak.

En publicaciones anteriores del diario La Nación se señala que en una de las fotografías se puede identificar la presencia, en primer lugar, del jefe del grupo radical islámico, el imán Salid Ali Hijazi, quien recibe instrucciones de parte de Hassan Nasrallah, el líder supremo y secretario general de Hezbolá desde 1992, mismo año en que se produjo el atentado contra la sede de la embajada de Israel en Buenos Aires y que fuera atribuido al grupo terrorista libanés.

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