Los criminales que siguieron al fiscal Marcelo Pecci en Colombia con el objetivo de asesinarlo, utilizaron información de las redes sociales para ubicarlo. Así manifestó este martes el fiscal colombiano Francisco Barbosa, durante una conferencia de prensa para ofrecer detalles de la investigación, donde expresó un fuerte mensaje sobre el uso responsable de las plataformas.
“Yo creo que aquí hay un tema fundamental y quiero que, ojalá, me lo repiquen en el país con estas declaraciones que estoy dando: publicar en redes sociales sin responsabilidad se convierte en un arma o puede convertirse en un arma letal”, señaló Barbosa, titular de la Fiscalía General de Colombia.
“Los delincuentes manifestaron que en muchas ocasiones estuvieron perdidos, pero gracias a las redes sociales lograron la ubicación y el seguimiento del fiscal Marcelo Pecci”, reveló el funcionario. “Esto es muy importante, porque es que la vida no puede reducirse a publicar todo lo que uno hace todo el día”.
“Uno tiene que tener conciencia también de la preservación de su propia vida. Ese es un mensaje no solo para este caso, sino para todos los casos, para los menores de edad, para las personas que permanentemente creen que existen porque publican en las redes”, agregó. “Y creo que ese es un escenario muy importante porque ayer fue manifestado por estos delincuentes”.
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Análisis de redes sociales
Durante la presentación ante los medios, el fiscal colombiano relató que, este lunes pasado, cuatro de los detenidos aceptaron los cargos, en el marco de una inédita investigación que logró la celeridad de 22 días para llegar a los responsables del crimen ocurrido el 10 de mayo en una playa privada de Barú (Cartagena), al norte del país.
El procedimiento realizado en colaboración con la Policía Nacional de Colombia logró la reconstrucción de lo que ocurrió en el día del crimen, así como la recreación de los seguimientos y la preparación de la estructura criminal para cometer el hecho, según manifestó Barbosa.
En ese sentido, el fiscal cito que se hizo el estudio de 20 lugares, recaudaron 200 elementos probatorios; ubicación y recolección de cámaras de seguridad, 120; análisis de horas de video, 2.500; análisis de información técnica de antenas 40; así como 67 interceptaciones de líneas telefónicas, 27 entrevistas, 14 reconocimientos fotográficos, 10 análisis de redes sociales y, más de 3.000 actividades investigativas en 22 días.
Tirador identificado
Los investigados son: Francisco Correa, señalado articulador; el ciudadano venezolano Wendre Still Scott Carrillo, quien habría disparado contra el fiscal; Eiverson Arrieta, supuesto responsable del transporte; Marisol Londoño y su hijo, presuntos involucrados en seguimientos.
La investigación estableció que las cinco personas procesadas residen en Medellín, Antioquia. Al parecer, el 5 de mayo se reunieron en un local comercial de la Plaza Minorista y definieron el plan criminal. Al día siguiente, por vía terrestre y aérea, se trasladaron a la Costa.
El 9 de mayo, madre e hijo se trasladaron al hotel de Barú, donde estaban el fiscal Pecci y su esposa. Pagaron un plan de tres días todo incluido y, presuntamente, comenzaron el seguimiento y marcación de la víctima. Hay registro de 36 llamadas entre la mujer y Francisco Correa.
El día del homicidio el presunto sicario, junto a otro hombre, se movilizó a Playa Blanca. Pagaron por una moto acuática y esperaron a que Londoño y su hijo, desde el mar, les dieran las indicaciones con movimientos de brazos para llegar a la playa en la que descansaba el fiscal.