Ante el planteamiento de senadores paraguayos, encabezados por el presidente del Congreso Nacional, el colorado oficialista Óscar “Cachito” Salomón, en alianza con sus colegas de la izquierda, de adquirir combustible de Venezuela, Juan Fernández, quien ocupó el cargo de gerente de Planificación del sector Internacional Corporativo de Petróleos de Venezuela (PDVSA), afirmó que se requiere primeramente un cambio en el modelo político y económico para que el país bolivariano pueda reactivar su maquinaria de producción para que la propuesta se vuelva efectiva.

En ese sentido, dijo que bajo el régimen dictatorial ejercido por Nicolás Maduro, Venezuela no cuenta con la capacidad de proveer de combustible a otros países, teniendo en cuenta que también sufren de una escasez interna.

“Cuando Hugo Chávez llegó al poder en el 2002, estaba produciendo 3,3 millones de barriles por día, pero hoy en día Venezuela está produciendo 660 mil barriles aproximadamente de acuerdo a las fuentes dependientes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP)”, indicó mediante una entrevista realizada en el programa “A punto”, emitido por el canal GEN-Nación Media.

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Al respecto, detalló que entre los países beneficiados por la exportación de combustible se encuentran Cuba, teniendo en cuenta que sus autoridades simpatizan con “la revolución” y acceden al petróleo sin importar que en Venezuela exista la cantidad suficiente, mientras que China adquiere el producto por la deuda que contrajo el país bolivariano.

“Venezuela, en el mes de abril, exportó alrededor de unos 462 mil barriles a ambos clientes. Desde este punto de vista, volumétricamente no hay disponibilidad de crudo para enviar a otro lado, el sistema de refinación de Venezuela está colapsado, no hay la producción de la gasolina que el país requiere y, en consecuencia, productos tampoco hay para exportar”, comentó.

Por otra parte, argumentó a la vez que existen trabas legales y financieras que pueden impedir que los países establezcan relaciones con PDVSA, el cual suma conflictos como su alto endeudamiento interno, poca capacidad de inversión y falta de mantenimiento.

“Si uno toma estas variables y dice si habrá posibilidades de negocios, en hacer intercambios, la verdad que no hay ninguna, el chavismo utiliza el petróleo como una herramienta política para una supuesta revolución. Esta visita que están haciendo estos diputados de una asamblea ilegal, no reconocida por nadie, resulta que debe ser por un tinte político”, puntualizó.

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Fernández comentó que en Venezuela incluso se está desmantelando parte de las instalaciones de la petrolera estatal y la venden como “chatarra”. “Se requiere de inversiones significativas para alcanzar en un periodo de 10 años aproximadamente un nivel de producción del orden de 2 millones y medio de barriles, eso significaría alrededor de unos 10 mil millones de dólares para llegar a un nivel incluso que está por debajo en el año 99″, explicó.

Fernández agregó que para reactivar la industria del combustible en Venezuela se requiere de una inversión privada tanto nacional como internacional. “Con la incertidumbre política, porque hay una crisis real, yo dudo que las empresas petroleras vayan a invertir masivamente en Venezuela por las condiciones que tiene el país, por lo tanto debe existir un cambio político y en el modelo económico para que se pueda reactivar la industria del hidrocarburo”, sentenció.

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