En conversación con La Nación-Nación Media, Otilia Rosemberg, una de las madres de la Asociación de Padres de Alumnos de la Universidad Politécnica Taiwán-Paraguay, se lamentó por la desidia del Gobierno actual, incluyendo a las autoridades de la Municipalidad de Asunción, por seguir poniendo trabas al proyecto de la construcción del edificio de la universidad mencionada.
“El lugar se ha convertido en un aguantadero, un basural y la gente que piensa que se está realizando una tala de árboles, está completamente equivocada, ya que por el contrario, lo que se hizo desde la aprobación del proyecto fue una forestación, ni siquiera una reforestación, porque en esa zona no se cortó un solo árbol, a pesar de que hay grupos ambientalistas que así lo sostienen. Lo que se ha hecho y se planea seguir haciendo es plantar más árboles en el área, porque la idea es que los alumnos convivan con la naturaleza”, sostuvo.
Por otro lado, la representante de la Asociación de Padres de Alumnos de la Universidad también lamentó que la falta de interés por parte de las autoridades del gobierno se dé a causa de diferencias políticas, ya que el proyecto para la construcción de la universidad y la firma del tratado con el gobierno de Taiwán fue hecho todo durante el gobierno anterior de Horacio Cartes.
“Es una lástima que nuestros hijos por buscar una mejor oportunidad en educación tengan que salir perjudicados por diferencias políticas que nada tienen que ver con ellos, y desde la Asociación de Padres les pedimos a la gente que venga a mirar lo que ha avanzado el proyecto, pero además la desidia de las autoridades, ya que en lugar de brindar los permisos y ayudas necesarias, están permitiendo que el lugar se convierta en un basural”, sentenció.
Agregó que inclusive los frentistas de la zona, dueños de negocios, apoyan la construcción de la universidad, ya que actualmente el predio de la futura universidad es un refugio de malvivientes, que en muchas ocasiones asaltan a los propios negocios aledaños y hasta a los mismos transeúntes que pasan por la zona.
Desde la Asociación de Padres puntualizaron, además, que nada de lo que compone el predio del Parque Guasu Metropolitano ni el Parque Ñu Guasu se verá afectado, ya que la sede de la futura universidad solo abarcaría un 0,5% de las 200 hectáreas que componen dichos parques, es decir, una porción ínfima, que seguirá siendo sitio de plantación de árboles y plantas nativas de la zona.
Especificaron que uno de los desafíos de la UPTP es justamente el salvataje y hermoseamiento de la zona, de manera que el ecosistema actual sea optimizado y sacado de su situación actual de abandono y contaminación, pudiendo pasar a ser un espacio ecológicamente equilibrado, dando oportunidad a las especies del área a desarrollarse en un ambiente favorable en contraste al actual ambiente tóxico y de descontrol.