El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, acaba de promulgar la ley del subsidio al combustible a través de Petropar, propuesta presentada por el propio Ejecutivo y que tuvo el visto bueno del Congreso Nacional esta semana. La normativa establece medidas transitorias de contingencia contempladas para dos meses y podría prorrogarse hasta 30 días más; incluye la comercialización del diésel común y nafta 93 octanos por parte de la petrolera estatal a los consumidores finales.
Luego de varias negociaciones entre el Ejecutivo y los legisladores, finalmente no hubo acuerdo para llevar adelante el préstamo de US$ 100 millones para subsidiar a la petrolera estatal, por lo que Petropar recibirá una compensación por la reducción que aplica al combustible.
Este proyecto ingresó a la Cámara de Senadores el pasado miércoles y fue tratado ese mismo día por el pleno en una sesión extraordinaria. En la ocasión no prosperó la propuesta del Ejecutivo de un nuevo préstamo para la financiación del fondo de estabilización a fin de subsidiar a la petrolera del Estado para bajar el precio del combustible para el consumidor final.
Una vez aprobado y con media sanción, la Cámara de Diputados también convocó a una sesión extraordinaria en menos de 24 horas para el tratamiento de la iniciativa, donde también fue aprobado sin modificaciones, por lo que quedó sancionado y remitido al Poder Ejecutivo. Ahora el proyecto ya está promulgado, luego de pasar por un tratamiento fugaz en el Congreso Nacional.
El proyecto de ley “Que crea el fondo de estabilización del precio de los combustibles derivados del petróleo en la República del Paraguay y se establecen medidas transitorias de contingencia para la importación del diésel/gasoil tipo III y la nafta virgen” establece que Petropar pueda estipular una disminución en el precio final que luego será compensada con transferencia del Ministerio de Hacienda.
Como medida de financiación se establece la racionalización de las compras públicas, prohibiendo permanentemente la asignación de cupos de combustible a las autoridades y funcionarios de los poderes del Estado, de los organismos y entidades del Estado y las municipalidades.
Mientras tanto, el Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Hacienda, deberá encontrar los mecanismos para lograr compensar gradualmente los recursos al emblema nacional, ya que se verán afectados por la aplicación de la reducción.