La Cámara de Diputados finalmente rechazó y remitió al archivo el pedido de juicio político a la fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, presentado por los sectores de la oposición y acompañado por la bancada del oficialismo. Con 37 votos a favor, 32 en contra, 6 abstenciones y 5 ausentes, no prosperó el enjuiciamiento a la titular del Ministerio Público.
La sesión extraordinaria se desarrolló tras la convocatoria del presidente de la Cámara Baja, Pedro Alliana, quien sostuvo que ya era momento de poner fin a la zozobra que se mantiene sobre el Ministerio Público. El plenario no tuvo muchas intervenciones, ya que la semana pasada ya fueron presentados todos los argumentos sobre el libelo acusatorio para activar el enjuiciamiento.
Al inicio de la sesión, el líder de bancada de Honor Colorado, el diputado Basilio Núñez, mencionó que el juicio político debió tener un punto final, principalmente ante las problemáticas del país y mientras la Cámara Baja se distrae con esta situación.
“No podemos vivir disociados de la ciudadanía, disociados de la realidad de la gente, gente que se está manifestando, soluciones a la problemática de la sequía, al aumento del combustible, al aumento de los productos de la canasta básica, hasta hechos de contrabando que sucedieron, como lo está tratando el Senado, mientras nosotros seguimos con el ‘cháke’ del juicio político”, argumentó.
Inicialmente, las bancadas de la oposición anunciaban que no participarían de la sesión para no dar quorum al pleno; sin embargo, una vez iniciada, ingresaron a la sala de sesiones e intentaron nuevamente evitar que se trate el planteamiento del juicio político.
El diputado Sebastián García, de Patria Querida, ante la imposibilidad de impedir la votación, planteó discutir sobre el narcotráfico, el crimen organizado y la política, mientras tanto el presidente de la Cámara Baja, Pedro Alliana, le aclaró que no en una sesión extraordinaria, ya que solo puede ser tratado el tema por el cual fue convocada la sesión.
Igualmente, la diputada Kattya González también intentó en un momento incidentar con sus colegas interrumpiendo las intervenciones, por lo que Alliana tuvo que solicitar el cierre del micrófono de la legisladora.
A pesar de los intentos de la oposición de no permitir avanzar en el tratamiento del planteamiento, la votación se llevó adelante de manera nominal y finalmente no se logró la mayoría de dos tercios para su aprobación y fue remitido al archivo. La iniciativa ya no podrá ser tratada por el plazo de un año.