El ambiente político se ve sacudido luego de destaparse el caso que vincula al exministro del Interior Arnaldo Giuzzio con el supuesto narcotraficante Marcus Vinicius Espíndola. Los congresistas oficialistas y opositores reciben de contramano la destitución de Giuzzio.

Ahora los diputados como Sebastián Villarejo, de Patria Querida, también pedían la destitución o renuncia del cuestionado exsecretario de Estado, que había denunciado a la fiscala general del Estado Sandra Quiñónez por supuestamente no actuar en casos que habrían involucrado al expresidente de la República, Horacio Cartes.

“Esta mañana dije que el ministro del Interior debía renunciar o ser destituido, porque las instituciones necesitan credibilidad. Así como Giuzzio fue removido ahora, Sandra Quiñónez debe dejar el cargo. La institucionalidad por encima de la individualidad. ¡Paraguay se merece!”, expresó Villarejo. Cuando queda pendiente el estudio del libelo acusatorio contra la fiscala que se sustenta en las controvertidas denuncias de Giuzzio.

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Evitaron dar declaraciones

En el mismo sentido, también la diputada Celeste Amarilla lamentaba que lo hayan defendido en su momento cuando fue juzgado políticamente. “¡Hasta acá ministro Giuzzio! ¡No puede un ministro del Paraguay andar prestando vehículo! En vez del populismo de sueEscarabajo se hubiera comprado usted una camioneta con su propio dinero. Debería pedirnos disculpas a los que defendimos su gestión. Pobre Paraguay, cada día un escándalo”, decía en su red social.

Los senadores Juan Afara, Juan Bartolomé Ramírez, Amado Florentín, Carlos Zena, Fernando Lugo, Pedro Santacruz, Sixto Pereira, Lilian Samaniego, así como el propio presidente del Senado, Óscar Salomón, se escaparon de dar declaraciones a la prensa, esta mañana, según informes de la periodista Francisca Pereira al canal GEN. De esta forma evitaron hablar sobre uno de los escándalos que nuevamente afectan al gobierno de Mario Abdo Benítez.

Hoy la posición política del oficialismo está en el ojo de la tormenta, teniendo en cuenta que en su momento salvaron al exministro de un juicio político en la Cámara de Diputados, cuando éste debía de responder por los diferentes hechos de inseguridad que golpeaban a la República. En las últimas horas, trascendió que el presunto narcotraficante brasileño cedió a Giuzzio el uso de un vehículo de su propiedad para que vacacione en Brasil.

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