El fiscal Rogelio Ortúzar, que fue parte del equipo de investigación del secuestro y asesinato de Cecilia Cubas, señaló que en lo que respecta a la extradición de Rodrigo Granda a Colombia y no a Paraguay es una cuestión que escapa de lo jurídico o judicial, porque representa una decisión eminentemente política y administrativa por parte de México.
Al respecto, señaló que esta decisión también es violatoria a un tratado bilateral firmado y ratificado por legislaciones de Paraguay y México, en cuanto al régimen de extradición.
En conversación con Universo 970 Am, Ortúzar recordó que Granda, exlíder de la FARC, está sindicado como autor intelectual del secuestro y asesinato de Cecilia Cubas, con base en material técnico, correos electrónicos, con el principal condenado Osmar Martínez.
En cuanto a la situación de Granda, sobre su detención en México, el fiscal aclaró que la orden de captura siempre es expedida por un juez de Garantías y no por el Ministerio Público. Sostuvo que desconoce si fue por un error o picardía la información de que no existía una orden de captura de parte de la Justicia paraguaya. Ortúzar ratificó que la orden de captura la emitió el juzgado de garantías.
“Una orden de captura internacional siempre debe ser expedida a través de un juez penal de Garantías y no a través de la Fiscalía. Acá se difundió una información errónea. Esa orden de captura se introdujo a través de los canales correspondientes, que es la Interpol. Acá hay una cuestión que escapa al ámbito jurídico o judicial, estamos ante una decisión política y administrativa del Estado de México el cual también es violatorio de tratados bilaterales firmados, ratificados e incorporados a la legislación de ambos países”, explicó.
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Ante esta situación, señaló que el caso adquiere una situación mayormente escandalosa, por el hecho de obviar una orden de captura internacional, expedida por una autoridad competente, requerida por un Estado con el cual se firmó un tratado en esta materia.
Asimismo, aclaró que la orden de captura internacional se maneja a través de una red mundial, que de la misma forma que se maneja aquí en Paraguay, se maneja en México, en Inglaterra, o en cualquier país firmante del Tratado Internacional de Interpol. “La misma orden de captura contra una persona aquí en Paraguay está diseminada la orden en todos los países firmantes del tratado de Interpol”, indicó.
Ortúzar aclaró que no maneja los entretelones de este caso en particular, de por qué Granda no fue extraditado inmediatamente a Paraguay, habiendo una orden de captura en su contra. Pero insistió que de haberse hecho las cosas en forma, el Estado de México debía informar a la Interpol, esta a su vez a Interpol Paraguay, que a su vez al Ministerio Público, del cumplimiento de una orden internacional emitida y ahí se inicia un plazo de acuerdo al tratado de extradición, para cumplir con el requerimiento por la vía diplomática.
“Esta fue una cuestión apurada, una cuestión que se decidió de manera administrativa y políticamente. Obviaron una orden de detención y de esto estoy seguro que nada tiene que ver Interpol Paraguay; y que nada tiene que ver con la cuestiones judiciales”, expresó el fiscal.
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