El jurista Raúl Prono se refirió al exabrupto del secretario de la Presidencia, Mauricio Espínola, quien pidió un cese de las críticas al gobierno de Mario Abdo Benítez y a los principales autores del mismo por parte de los medios del Grupo Nación durante un encuentro político.

A criterio de Prono, así como no hay impedimento para que una persona exprese su opinión, tampoco lo hay para que los medios de comunicación tengan una postura crítica sobre la gestión o administración pública, derecho que incluso está amparado en la Constitución Nacional, en la que está consignada la libertad de prensa y la obligación de los ciudadanos de denunciar irregularidades u hechos de corrupción.

“Si bien no hay norma que impida al secretario de la Presidencia de la República decir lo que se le plazca, en este caso, este pedido es totalmente improcedente”, sostuvo Prono.

El profesional del derecho agregó que Espínola, como secretario privado de la Presidencia, puede decir o pedir lo que considere, pero que no puede no conocer una norma constitucional y de conocimiento general para todos, como lo es la libre expresión. En esa línea, Prono subrayó que “el diario La Nación no debe limitar su actuar, ni sus expresiones, permitiendo el mal desempeño de funciones del gobierno” solamente porque así lo solicita la mano derecha del mandatario.

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“Los medios de prensa no están sujetos, desde luego que no, a ningún tipo de campaña política de ningún partido si de por medio está impedir la libre expresión”, aseveró Prono y reiteró que la postura del secretario de la Presidencia es totalmente improcedente.

Para el jurista, lo manifestado por Espínola no amerita tomar ninguna medida; un caso contrario sería si el mismo hubiera hablado u opinado en nombre de la Presidencia de la República, hecho que sí podría considerarse peligroso.

Prono insistió en que el secretario político, “a parte de usar mal el micrófono”, tuvo una postura por demás improcedente.

Por otro lado, destacó la respuesta del expresidente de la República, Horacio Cartes, propietario del Grupo Cartes, que integra el Grupo Nación, quien estaba presente durante el exabrupto de Espínola. Cartes contestó de manera correcta, oportuna y comedida la petición del secretario presidencial, más conocido por su gestión como cabeza de seccional que por su lucidez política.

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