Los senadores del Partido Patria Querida (PPQ), cuestionaron el blanqueo en la Cámara Alta, tras el rechazo de las solicitudes de las pérdidas de investidura de sus colegas Sixto Pereira, Rodolfo Friedmann y Javier Zacarías Irún, aprovechando la crisis sanitaria por el COVID-19 para que lo resuelto en el estamento pase desapercibido por la ciudadanía.
Al respecto, los senadores Georgia Arrúa y Stephan Rasmussen, lamentaron las actuaciones de la mayoría que llevó a la presidencia del Congreso Nacional al colorado Óscar “Cachito” Salomón.
“Mientras la gente está preocupada por salvar sus vidas y vacunarse, se cocinó el blanqueo hacia la impunidad en la cámara. Sinceramente no tienen vergüenza. La impunidad goza de muy buena salud, con una mayoría en el Senado”, mencionó Rasmussen.
Lea también: Barrios critica la “operación lavandina” bajo la presidencia de Cachito Salomón
Mientras que su colega Arrúa, lamentó que en el Senado, tras su depuración ahora haya retornado a la farra, sosteniendo que es una “vergüenza” que a través de una mayoría circunstancial se haya blanqueado a sus colegas.
“Es muy vergonzoso y doloroso, el Senado recuperó su imagen en un tiempo al depurarse a sí mismo. Es una mayoría circunstancial. No se respeta a la gente, es un yo te protejo, vos me protegés y que siga la farra, pobre país con la operación de blanqueamiento exitoso”, dijo.
“Les importa tres cominos la imagen que damos como Senado”
La legisladora manifestó también que incluso sus colegas siguen confundiendo el proceso de uso indebido de influencia con el tráfico de influencias.
“Estamos cada vez peor, se perdió totalmente el respeto a la institución. Les importa tres cominos lo que piensa la gente y la imagen que damos como Senado. Es una vergüenza. Y siguen nomás confundiendo el uso indebido de influencia (causal de pérdida de investidura conforme a la Constitución Nacional) con el tráfico de influencia (hecho punible tipificado en el Código Penal). ¿Creen que solo fingen ignorancia?”, dijo.