La Organización de Trabajadores de la Educación del Paraguay (OTEP) presentó el día de hoy ante el Congreso Nacional el proyecto de ley “que declara emergencia educativa en todo el territorio y crea la tasa extraordinaria a las grandes fortunas”. La propuesta plantea tasar a las fortunas mayores a los US$ 10 millones y destinarlo al mejoramiento de la educación.
Se establecería una Tasa Extraordinaria a las Grandes Fortunas (TEGF) con una expectativa de recaudación (solo en tierras) de US$ 1.300 millones, indican desde la OTEP-SN.
La profesora Juana Larrea de la OTEP-SN explicó que en la pandemia la educación fue duramente golpeada, igual que otros sectores. Dada la indefensión de los docentes y alumnos proponen financiar las compras de bioseguridad, las infraestructuras, la conectividad, la capacitación y la alimentación. Sostienen que el gobierno podrá así invertir el 1% del Producto Interno Bruto (PIB) en educación.
Apoyo de senadores opositores
Los senadores opositores Hugo Richer, Pedro Santacruz y Victor Ríos acompañan la propuesta. Richer, por su parte, dijo que con el gremio de docentes están oficializando la presentación del proyecto de ley de Emergencia Educativa. Dijo que para fondear el proyecto plantea una tasa a las grandes fortunas por la educación a las personas que tienen US$ 10 millones para arriba.
La OTEP-SN dice que la emergencia no es solo por la pandemia, sino estructural y esto busca cambiar con el proyecto de ley. Plantean declarar emergencia educativa por 3 años, renovable por decreto. Buscan específicamente: limpieza y contratación de personal; infraestructura que incluye agua potable y luz eléctrica; conectividad, capacitación docente conectada con su carrera; universalización de alimentación escolar.
Se establecería una Tasa Extraordinaria a las Grandes Fortunas (TEGF), similar a la Tasa COVID, y por única vez, con alicuótas de 1% a 5% para fortunas superiores a US$ 10 millones. El principal elemento de la TEGF es la valorizaciónn de la tierra rural a precio de mercado según los propios estudios de Catastro, con una expectativa de recaudación (solo en tierras) de US$ 1.300 millones.
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