El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto fue visto participando del popular piki vóley con sus amigos, ajeno al trágico momento que está viviendo el país debido a la pandemia del COVID-19, que ya se cobró la vida de 5.040 compatriotas.
El diputado Basilio “Bachi” Núñez se hico eco de las imágenes viralizadas a través de las redes sociales y fustigó el accionar de la justicia que se muestra implacable con algunos y complacientes con otros, como en este caso del jefe comunal esteño.
“El ininmputable Miguel Prieto jugando piki con sus amigos, total ellos no transmiten COVID-19. Si era yo puntape imputado y con prisión por peligro de fuga si el juez es Pedro Mayor”, ironizó el legislador colorado a través de su cuenta de Twitter, dejando entrever la venalidad e ineficiencia de los organismos encargados de intervenir para dar cumplimiento al decreto presidencial que contempla medidas restrictivas de cumplimiento obligatorio para la ciudadanía.
La conducta del intendente, quien aspira la reelección, no condice con la aparente preocupación por la salud de la comunidad que manifestó recientemente al anunciar el interés de adquirir con fondos de la comuna unas 200.000 dosis de vacuna anti-COVID-19 para inmunizar a la población vulnerable esteña.
En esa ocasión, Prieto incluso se jactó de contar con los recursos necesarios para el financiamiento de los inmunizantes, demostrando un manejo autónomo de las decisiones del Gobierno que gestiona las compras de los biológicos a través del Ministerio de Salud y la Cancillería Nacional.
Sin embargo, en medio del alza de contagios, con más de 2.000 casos positivos y más de 60 muertes diarias a causa del nuevo coronavirus; Prieto burla las medidas sanitarias y participa de actividades deportivas que implican la aglomeración de personas, poniendo en riesgo la salud de los participantes y de quienes posteriormente tengan un contacto cercano con ellos.