Ningún hospital del país escapa de la realidad ante la crisis sanitaria a causa del COVID-19, más ahora que se registra un repunte en los casos positivos por contagios comunitarios. Al respecto, para conocer mejor la situación que enfrenta actualmente el Hospital de Clínicas, importante centro asistencial para personas de escasos recursos, fue invitado el profesional de blanco Jorge Giubi, actual director de este centro asistencial dependiente de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Asunción, en el programa “Fuego cruzado”, que se emite por GEN.

El doctor Giubi dijo que, ante los aumentos de casos, la demanda en los servicios sanitarios se incrementó y que la infraestructura aún continúa sin condiciones para enfrentar la pandemia, argumentando a la vez que tuvieron que reconvertir muchas áreas. Aunque el Hospital de Clínicas no era un nosocomio de referencia para la atención de pacientes con COVID, la crisis obligó a llevar adelante acciones para brindar atención médica en todas las especialidades, además de los pacientes con cuadros respiratorios sospechosos de contraer el virus.

“Si hacemos un análisis, el Hospital de Clínicas siempre fue carente y por cosas de la vida se convirtió en el hospital para los pobres, un hospital pobre para los pobres, en verdad tenía que ser el más rico del país con todos los estándares de control y transparencia, ya que eso es lo que se cuestiona mucho. Hay gente que viene con absolutamente nada, agricultores que si no cosechan y no venden no pueden tener nada, son jornaleros, entre otros”, sostuvo el profesional de la salud.

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Condiciones presupuestarias

El director de Clínicas señaló que, lastimosamente, el presupuesto no se condice con las necesidades asistenciales que el hospital está ofreciendo y existen muchas carencias, por lo que los costos se trasladan a los pacientes. “El Hospital de Clínicas depende de la Facultad de Medicina, que tiene vigencia como hospital escuela hace 123 años, trabajando, dando asistencia y tiene un rol social que es innegable. Si bien existen arancelamientos de procedimientos, pero también hay que decir que el 75% de todos los procedimientos tiene una exoneración del 100%. Mientras que el restante tiene una exoneración entre el 50 y 75 por ciento”, comentó.

Hospital de Contingencia

Por otra parte, habló de lo que fue este año COVID con relación a las otras patologías y, en ese sentido, señaló que el servicio de urgencia del hospital no paró de atender las diferentes enfermedades, como diabetes, hipertensión, pacientes oncológicos que no podrían ser dejados de lado y que en su gran medida fueron afectados por la pandemia.

Indicó que el próximo 11 de marzo se cumplirá un año de que el Hospital de Clínicas comenzó a funcionar como hospital de contingencia. “Tuvimos que improvisar, redirigir, tuvimos mucho miedo todos los que estábamos ahí, porque era algo desconocido. Pero hoy en día tenemos un servicio de contingencia que está mejor estructurado y que sigue trabajando”, comentó.

Programa "Fuego cruzado". Foto: Eduardo Velázquez.

Resaltó que lograron el desarrollo de la teleconsulta, el triaje virtual, el médico evalúa la condición de urgencia, le pedía al paciente que se acerque al hospital. En cuanto a la ocupación de camas, dijo que el área polivalente tiene un alto porcentaje de internaciones y que, antes del repunte de casos, tenía cirugías programadas. Existen servicios que están trabajando muy bien con la telemedicina, tenían un 80% de ocupación de camas. Pero ahora se llegó al 100% con el incremento de casos respiratorios. El promedio de ocupación de cama por pacientes COVID es mayor a lo habitual.

Señaló que existe una alta demanda de pacientes con criterio de internación, pero faltan camas donde ubicarles. Entonces, es ahí donde el personal sanitario se las ingenia para brindar asistencia a los pacientes. Indicó que él, desde la dirección del hospital, pone todo el esfuerzo, pero son los médicos y enfermeras los que ponen todo de su parte, arriesgando su salud y la de sus familias, trabajando en el frente de batalla.

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Por otra parte, Giubi afirmó que ante las carencias en el sistema sanitario todo dependerá ahora de la ciudadanía, que deberá aplicar todo lo aprendido en el 2020 para poder mitigar el nivel de contagio del COVID-19.

“Más que el Estado, yo creo que la ciudadanía tiene que entender y mi opinión personal es que yo creo que el encierro ya no es una opción hoy en día porque realmente la economía se vio demasiado afectada. Hubo mucha gente que sucumbió, gente que no puede pagar su tratamiento porque ya dejó de trabajar un año, no tiene la capacidad de adquirir un medicamento. Eso perjudicó mucho al sistema de salud y, por otro lado, se adquirieron conductas que son mínimas, pero sabemos que son efectivas para mitigar el contagio y creo que están al alcance de todos, con todo esto podemos bajar la cantidad de casos de contagio que hay en la sociedad y eso va a descomprimir más el servicio de urgencias y nos permitirá sacar a los pacientes de la cama”, indicó.

Manifestación convocada por los profesionales de la salud

Respecto a la manifestación fijada para mañana por parte de los profesionales de la salud afirmó que no desconoce la legalidad del reclamo, pero sostiene que no es la manera de exigir mejoras teniendo en cuenta que incumple unas de las medidas efectivas para hacer frente a la mortal enfermedad.

“Yo creo que es el sentir del funcionario. Nosotros sufrimos la pérdida de compañeros y la sensibilidad está a flor de piel, para mí no es la forma de reclamar. Yo creo que esto genera algo que queremos combatir, la aglomeración, dificultades para dejar el lugar de trabajo, hoy en día se necesita a toda la fuerza laboral en su lugar de trabajo ejerciendo la medicina en todos sus aspectos y áreas. No desconozco la legalidad del reclamo porque queremos medicamentos”, sostuvo.

Respecto a los medicamentos que son necesarios para realizar las intervenciones como por ejemplo el atracurio y midazolam, manifestó que el Hospital de Clínicas cuenta todavía con ambos insumos que durarán probablemente todo el presente mes.

“En las estadísticas internacionales se vio que los pacientes con COVID tienen altas estadías hospitalarias y se previó que el consumo iba a ser importante, entonces se compró una cantidad que hoy en día nos ayuda a permanecer. Hay que entender que el colapso es la incapacidad de respuesta y sí, si esto sigue así y con esta curva de contagios directamente vamos a estar sin capacidad de respuesta en el sistema público. Yo hablo con propiedad por el hospital, vamos a hacer lo que podamos, pero no vamos a poder dar soluciones como corresponde para todos los problemas que se presentan”, sentenció.

Programa "Fuego cruzado". Foto: Eduardo Velázquez.

“El paraguayo tiene que tener garantizada la salud”

Finalmente, el médico fue contundente en sostener que la evolución de los pacientes que contrajeron el virus en su mayoría se debe a la empatía de los médicos y enfermeros que, ante las carencias tanto de insumos e infraestructura, saben hacer frente al problema.

“Yo atribuyo la evolución de los pacientes al valor que tienen en recursos humanos el hospital, la empatía y la solidaridad de los médicos y las enfermeras que no dudan a la hora de ayudar al prójimo. No quiero normalizar esto ni quiero justificar nada. El paraguayo tiene que tener garantizada la salud, pero es un gesto que hace que hasta el más carenciado pueda acceder a terapéuticas que por ahí en otros medios serían prohibitivas”, indicó.

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