El senador Stephan Rasmussen considera que la ciudadanía está cansada de la impunidad, lo que da como una reacción el caso de escrache sufrido por el jefe de Gabinete, Juan Ernesto Villamayor, el sábado pasado, en un lujoso restaurante asunceno. El hartazgo es lo que se reflejó por la falta de justicia jurídica.
“Representa el hartazgo y sobre todo el cansancio de que no llegue la justicia y la impunidad que hay en tantos casos sonados”, expresó. Entonces, cuando se dan tantos indicios de corrupción: “Evidentemente pasa eso, se vuelve una justicia social en vez que la jurídica funcione”, lamentó el líder de la bancada del Partido Patria Querida.
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De esta forma, reconoce que la injerencia política y de dinero que hay dentro de los órganos como la Fiscalía permite que esto termine explotando de la peor forma, como el escrache a Villamayor que llegó a la agresión física. “La gente se cansa, finalmente termina pasando lo que pasó el sábado de noche, es una señal clara de la ciudadanía cansada de la impunidad y corrupción”, expresó.
El hecho que generó la gran celebración de un porcentaje de la ciudadanía por redes sociales fue el escrache del jefe de Gabinete cuando éste se encontraba cenando en un restaurante capitalino, momento en el que ciudadanos exigían su salida.
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Además, sufrió el golpe que le propinó el empresario ganadero Darío Felipe Giménez, lo que se dio como consecuencia de presuntamente querer agredir a una mujer que exigía su salida del lugar. Luego del incidente, Villamayor tuvo que retirarse del sitio. A su salida, las demás le gritaron “fuera” y arrojaron varias cosas.
A la indignación se le sumó el comunicado del Ministerio de la Mujer, que buscaba repudiar los hechos de violencia que supuestamente se dieron contra las mujeres que acompañaban al secretario de Estado. En su mayoría, la connotación que se le dio fue una defensa por parte del ministerio al cuestionado político.