El ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, manifestó que es necesario que se establezca un mecanismo estricto de eliminación de postulantes dentro de las filas policiales con el fin de excluir a aquellos aspirantes que no estén capacitados para asumir el compromiso de resguardar a la ciudadanía, apostando principalmente a los test psicotécnicos que en la actualidad no son primordial para el ingreso a las academias.

“Yo creo que la corrupción es transversal a toda política pública que uno pueda iniciar, supongamos que apostemos a la tecnología, pero quién opera la tecnología; si ya está contaminado no tiene sentido, creo que tenemos que ir partiendo de la base, tanto los institutos y las academias de policía son fundamentales, creo que tenemos que ir modificando la malla curricular. Hay una ley que dispone los diferentes mecanismos y entre ellos deja en último lugar los test psicotécnicos”, sostuvo.

Al respecto Giuzzio dijo que teniendo en cuenta las sugerencias de algunos académicos los test deberían determinar el ingreso de los aspirantes con el propósito de que la Policía no sea el refugio de las personas.

“Desde mi punto de vista y de acuerdo a la sugerencia de algunos académicos tendría que ser el primero porque de ahí ya surgiría el perfil del postulante a policía, sin embargo, este va al último análisis y tampoco es excluyente, es decir, si no pasa igualmente si pasó todo los demás debe ingresar a la academia policial, creo que ahí debemos ser muy rigurosos, si de mí dependiera deberíamos tener gente que se encargue estrictamente de cómo eliminar postulantes; su misión debe ser hacer todo el esfuerzo para la eliminación de postulantes, la idea que esto sea exigente y que la Policía no sea el refugio de personas, de jóvenes que ya no tienen otra perspectiva de vida, sino ser policías”, indicó.

Refirió también que el modelo operativo de los agentes de Lince debe ser replicado en las distintas comisarías del país, evitando de esa manera realizar procedimientos pasivos en el combate a la inseguridad.

“Grupos de comisiones vecinales solicitaron la presencia del grupo Lince en las diferentes unidades, sin embargo, es imposible, tiene todo un proceso de formación, pero de alguna forma creemos como una potencial medida hacer que las operaciones de las comisarías sean muy similares a aquellas realizadas por el grupo Lince, que sean más agresivas, más presentes, más firmes y no de prevención pasiva como lo hace la mayoría de las comisarías”, mencionó.

Por otra parte, agregó que la crisis sanitaria por el COVID-19 colaboró en los hechos de inseguridad impulsando la instalación por ejemplo del microtráfico, flagelo que azota a varios barrios de la capital, el departamento Central y ciudades del interior.

“Yo creo que la pandemia marcó un antes y un después y continuamos y si tuvo un efecto la pandemia aparte de los relacionado a la salud, fue lo económico y ese impacto se sintió en diferentes áreas, eso baja e impacta no solo en aquellos que están económicamente más sólidos, sino también en los lugares más vulnerables y eso impulsa el microtráfico que es hoy en día uno de los hechos punibles que más sensación de inseguridad genera en casi la mayoría de los barrios de Asunción, distritos del departamento Central y también mucho en el interior”, puntualizó.

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Sobre la presencia de los grupos organizados transnacionales, cada día se va profundizando y que los mismos llegaron para quedarse, incluso existen paraguayos que integran sus filas y que se encuentran adiestrados y formados para dar seguimiento a sus ideas.

“Ellos tienen mucha injerencia, hay que ser honestos en este tema, el crimen organizado llegó a instalarse y posicionarse en principio en fronteras, en zona de Amambay, pero posteriormente fueron viendo como un potencial lugar de adoctrinamiento y de captación de gente en las penitenciarías. La recomendación de especialistas es mantenerlos no separados, como un principio se creía porque era el plan original de estos grupos, ellos querían aprovechar esta separación en influir y captar a gente que puedan ingresar a esas organizaciones y hoy hay paraguayos que ya forman parte de estas organizaciones criminales, totalmente adiestrados, formados y convencidos de esas ideas”, dijo.

Finalmente, se refirió sobre los secuestros realizados por el grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), afirmando que hubo avances importantes en las investigaciones y que solo faltaría el golpe final.

“Hoy es otra generación de autores con una misma posición, creo que esto antes de un secuestro extorsivo es político y el impacto de un secuestro a un político, exvicepresidente de la República, no es lo mismo que secuestrar a otros en el sentido de la proyección mediática y el impacto a nivel nacional y regional y no digo que con esto los otros sean menos atendibles. Hasta donde sé, hubo avances hasta en un punto, creo que falta el golpe final, están individualizadas las personas, los autores del hecho, hay testimonios y creo que también herramientas técnicas, en lo posible hacer operaciones sin poner en riesgo la vida de las personas que están secuestradas”, puntualizó.

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