Jorge Rodríguez no solo es el presidente de la cuestionada Asamblea Nacional instalada a comienzo de año en Venezuela, sino que además es el hermano de Delcy Eloína Rodríguez, quien junto a Nicolás Maduro y su esposa Cilia Flores, que se hace llamar “la Primera Combatiente”, forman lo que los analistas políticos y millones de venezolanos consideran como la cúpula chavista, manejada desde La Habana.
Nadie duda en responsabilizar de la desastrosa situación social, política y sobre todo económica por la que atraviesa el otro millonario país del norte de Sudamérica, a la errante administración de la “cúpula”, que desde hace más de 20 años gobierna Venezuela.
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Esta misma persona, que actualmente es considerada como posible sucesor de Nicolás Maduro al frente del régimen chavista, trató de ladrones a quienes en Paraguay estaban realizando las negociaciones para la cancelación de la deuda que tiene el Estado con Petróleos de Venezuela SA (PDVSA), una empresa que fue prácticamente destruida por la mala administración bolivariana.
Rodríguez, quien antes de convertirse en presidente de la ilegal Asamblea Nacional de Venezuela, era el encargado del Ministerio de Comunicación del gobierno de Maduro y durante una exposición ante los demás asambleístas, donde estaba criticando el actuar de sus antecesores, recordó el caso de la negociación entre Juan Ernesto Villamayor y Javier Troconis, designado por el gobierno interino de Juan Guaidó para la recuperación de activos de Venezuela en el exterior.
Ladrones en Paraguay
“Por ejemplo, ¿como es posible que la Junta Directiva del Parlamento venezolano, haya hecho negocios con algunos ladrones en la República del Paraguay, para que una deuda de más de 300 millones de dólares, fuera completamente condonada?”, se preguntaba Rodríguez, en abierta referencia al jefe del Gabinete Civil de la Presidencia, Juan Ernesto Villamayor y quienes pudieron haber participado del supuesto negociado.
Una vergüenza
Jorge y Delcy Rodríguez son hijos de Jorge Antonio Rodríguez, un guerrillero venezolano, quien falleció de un infarto luego de ser sometido a torturas mientras se encontraba detenido en Caracas, en 1976. En redes sociales, los usuarios consideraron una vergüenza que desde el gobierno de Venezuela, considerado el más corrupto del continente, se refieran de esa manera, aunque era claro que el mensaje iba dirigido a quienes intentaron negociar la deuda con PDVSA.
La mención al intento de condonación de la deuda con PDVSA y a los “ladrones en el Paraguay”, fue realizada por Rodríguez durante la plenaria de la Asamblea Nacional, en momentos en que se insiste en crear campañas de persecución a los anteriores legisladores venezolanos.
Rodríguez advirtió que investigarán a todas las directivas del Parlamento desde 2016 y “de encontrar irregularidades”, se ejecutarán inhabilitaciones políticas hasta por 15 años. “El nuevo hombre” del régimen chavista, ocupa el lugar que dejaron Diosdado Cabello o Tareck Elaissami, ambos sancionados por el gobierno norteamericano por vínculos con el narcotráfico o el terrorismo islámico.