El regreso a la Cámara de Diputados de Ulises Quintana se dio en la sesión extraordinaria de hoy martes. El legislador aprovechó y recriminó el hecho de que el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, lo haya ignorado durante su proceso judicial. De igual forma, sostuvo que continúa con la bancada de Colorado Añetete.
“Un líder que no busca justicia nos desmoraliza”, expresó. Ante su regreso, dijo que seguirá conversando con sus colegas. En una jornada de gobierno en Alto Paraná, Abdo fue escrachado por un adepto al diputado, quien le recriminó por supuestamente “abandonarlo” en su proceso penal, mientras que su respuesta fue: "No soy la Justicia… no soy la Justicia… no soy la Justicia, hermano querido”.
Aunque sigue con el oficialismo, Quintana reconoció que "siempre hay un dolor, porque es el líder político (por Mario Abdo) para el que trabajé, le dimos un triunfo de 21.800 votos en las internas contra la estructura de la Municipalidad de Ciudad del Este, la Gobernación, Itaipú y el Gobierno Nacional”, expresó antes del inicio de la sesión.
Por otra parte, reiteró que la pérdida de investidura debe de darse luego de una sentencia judicial. Recordando que el proyecto de reglamentación del artículo 201 de la Constitución Nacional está en estudio en la Cámara de Diputados. “Dice claramente que debe ser por tráfico de influencia debidamente comprobado, con una sentencia firme ejecutoriada; una persona condenada que no pueda recurrir a otra instancia, ahí se puede dar la pérdida de investidura, de otra forma no se puede dar”, agregó.
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Por otra parte, manifestó que su compromiso principal es con la gente que lo acompañó, y dentro del Partido Colorado para generar el progreso y desarrollo. Atendiendo a que seguirá insistiendo con su candidatura como intendente de Ciudad del Este, postura que asegura fue el motivo por el cual le enviaron a prisión.
El diputado colorado fue acusado por supuesto lavado de dinero y asociación criminal, por lo que estuvo recluido en la cárcel militar de Viñas Cué. También está acusado, en el mismo caso, Reinaldo Javier “Cucho” Cabaña, con quien habría mantenido una conversación que sirvió como la causa por la cual se inició su proceso judicial. Inicialmente estuvo recluido desde setiembre del 2018 y obtuvo tres meses de libertad ambulatoria a fines del 2019.
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