El salvataje corporativo brindado al senador colorado Rodolfo Friedmann e impulsado principalmente por su colega Lilian Samaniego sería un salvavidas para la cuestionada legisladora, teniendo en cuenta que ambos tienen un punto en común, los clanes instalados dentro del Estado con fuertes tentáculos que servirían de influencia para las amañadas licitaciones que terminan finalmente favoreciendo a sus entornos familiares y políticos.
No hay que olvidar que detrás del criticado clan Ferreira, conformado por Marcelo y Patricia Ferreira, hijos de Justo Ferreira, dueños de Imedic SA, envueltos en las fallidas adquisiciones de los insumos y equipos médicos chinos en pleno conflicto sanitario por el COVID-19, sale a flote otro clan, el de los Samaniego, mediante 2 jóvenes, María Laura Samaniego y Natalia Samaniego, quienes lograron un éxito rotundo en las facturaciones al Estado y el Instituto de Previsión Social (IPS).
Con tan solo 22 años, María Laura –próspera sobrina de la senadora, quien promueve en los últimos días llamativamente el respeto a los poderes del Estado y aguarda pacientemente las resoluciones judiciales– es una triunfadora proveedora del Estado con licitaciones por unos G. 73.000 millones en el rubro de los medicamentos, algunas obtenidas de manera independiente con su empresa Centro Médico Amanecer SRL y otras en alianza con firmas del clan Ferreira.
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La destacada pariente de la legisladora en el 2015 ya había ingresado a la firma con un capital de G. 666.600.000, suspicaz capacidad financiera que genera sospechas sobre el origen del dinero. Rumores de todo tipo giran en torno al padrinazgo político que logró consolidar el negocio de la joven con el Estado.
La firma donde es accionista la joven empresaria se denomina Centro Médico Amanecer SRL, pero no termina ahí, debido a que María Laura, a su vez, se ha unido con otras firmas como Imedic SA, Eurotec SA y otras empresas de los Ferreira.
Otra de las destacadas sobrinas de la legisladora colorada es Natalia, quien fue descubierta por ser dueña de un depósito donde los Ferreira guardaban los insumos hospitalarios que traían principalmente para el Ministerio de Salud el pasado mes de abril.
El depósito se encuentra localizado sobre Ingavi casi López de Filipi del barrio San Vicente de Asunción. Lo llamativo es que dicho local, de la familia Samaniego, era alquilado por la empresa New Logistic SA, donde también son accionistas Justo Ferreira y su hija Patricia Ferreira.
Cortados por la misma tijera
De acuerdo con estas informaciones, tanto Samaniego como Friedmann estarían cortados por la misma tijera, teniendo en cuenta que el exgobernador del departamento del Guairá fue descubierto sacando provecho del almuerzo escolar de niños en la zona y denunciado por su propio exsocio comercial Hugo Alexander Torales Viveros.