Daniel Centurión, asesor político del presidente de la República, en un análisis de los 2 años de gobierno de Mario Abdo respondió a varios cuestionamientos y defendió el actuar de la gestión gubernamental. Puso en contexto las críticas al gabinete de ministros y sobre Rodolfo Friedmann aseguró que: ”Si el ministro Friedmann es imputado, o renuncia o lo destituyen”.
“Si existen sospechas ciertas, seguramente el ministro de Agricultura y Ganadería va a ser imputado, y si es imputado, y lo poco que yo lo conozco a Rodolfo Friedmann, va a renunciar, va a dar un paso al costado y si no lo hace, lo mucho que le conozco al presidente de la República, evidentemente lo va a destituir”, puntualizó Centurión.
“Yo no quiero acompañar a un presidente tirano que concentre el poder”
En esa línea, Centurión, con bastante tino político y vehemencia al defender el gobierno Abdo, respondió a los periodistas que él proviene de una familia que fue víctima de la dictadura y que él está en contra del poder despótico y autoritario que manipule la Justicia.
“Yo no quiero acompañar a un presidente tirano y que tenga la concentración de poder y que levante el teléfono y diga quién se tiene que ir preso o quién tiene que salir en libertad o protegerlo”, dijo esto para dar a entender que Abdo demuestra no ser tiránico, al no entrometerse en las investigaciones sobre sus ministros.
El Poder Ejecutivo llama al Poder Judicial
Con contundencia hizo un llamado al Poder Judicial y al Ministerio Público para que intervengan ante los presuntos hechos de desfalcos, corrupciones y lesiones de confianza. “Que actúe la Justicia, que actúe la Fiscalía General del Estado y que el Poder Judicial condene de manera ejemplar. Ahí vamos a ver que en Paraguay va a terminar la impunidad”, aseveró.
“Con esto van a arrugarse los corruptos que se han hecho multimillonarios desde la función pública”, indicó el asesor del presidente Mario Abdo.
El propio Centurión aprovechó y felicitó a los colegas comunicadores por el periodismo de investigación, ya que son insumos que debe utilizar el Gobierno para evaluar su propia gestión y todo tipo de irregularidades, indicó. Centrándose en el caso Friedmann, indicó que si bien por un lado están las denuncias periodísticas, por el otro la querella penal planteada por el ministro. “Ambos elementos están siendo estudiados”, aseguró.
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