Suman y siguen las denuncias contra el ministro de Agricultura y Ganadería, Rodolfo Friedmann, quien dejó sin agua a varias comisiones y centenares de productores perdieron sus cosechas por la falta del líquido vital, pese a las recientes perforaciones. El ente estatal habría pagado G. 350 millones, siendo G. 74 millones el costo real.
“No tengo el monto exacto, pero más o menos el precio actual a nivel comercial rondaría los 300 millones de guaraníes un pozo con el motor y 350 millones de guaraníes con el tanque”, justificó Daniel Sanabria, presidente del comité de productores, en entrevista con el canal GEN, allegado a Friedmann.
Sanabria se excusó con supuestos errores administrativos ante las denuncias contra Friedmann y las supuestas sobrefacturaciones en la perforación de pozos, pese a que nunca hubo agua para los pobladores y productores de la zona del Guairá.
Mencionó que uno de los pozos presenta “problemas técnicos” por una pendiente en las inmediaciones y la gente ubicada hacia la zona alta ya no recibe el líquido vital. El presidente del comité responsabilizó también a los técnicos por no corroborar y dar respuesta a las denuncias de los usuarios.
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Tras dialogar con Sanabria, quien alegó que un pozo tiene un costo de G. 350 millones con el tanque y motor incluido, el equipo periodístico de GEN acudió a una empresa y solicitó presupuesto para una perforación, teniendo un costo muy inferior, siendo de las mismas características.
De acuerdo con los datos de la firma, un pozo de 200 metros de profundidad, con tanque y motor, cuesta G. 74 millones, habiendo una diferencia de G. 276 millones entre lo construido por el MAG y el precio real que el ente estatal pagó, G. 350 millones.
Uno de los pozos fue perforado en la compañía Cañada San Juan de Villarrica, departamento del Guairá, donde supuestamente 39 familias son las beneficiadas, a pesar de no tener agua. Friedmann usó hasta las redes sociales del MAG para destacar su gestión, queriendo hacer pasar desapercibidas las denuncias en su contra.
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El ministro de Agricultura y Ganadería está en el ojo de la tormenta por sus vínculos con la empresa de Eventos y Servicios (ESSA) por adueñarse de la merienda escolar en su época de gobernador mediante las “licitaciones”. También es acusado de monopolizar el plan de cáñamo hacia una sola empresa, Healthy Grains, vinculada al clan Ferreira, salpicado en el caso de las sobrefacturaciones de insumos médicos.