El presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), Luis Villordo, fue interpelado el día de hoy por la Cámara de Diputados luego de las denuncias de sobrefacturación durante la cuarenta total. En esta ocasión volvió a defender el sistema utilizado basado en la estimación del consumo promedio e informó sobre una inversión de 50 millones de dólares para nuevos medidores inteligentes.
Además, aseguró que los montos dados durante los primeros meses de la cuarentena fueron los correctos porque ellos habían informado a Hacienda que las exoneraciones llegarían a los 45 millones de dólares por los tres meses, monto que finalmente se dio al llegar al tercer mes.
“Explicamos que enviamos un valor estimado, el usuario tenía el negocio cerrado, es claro que vea esto como sobrefacturación”, dijo. Sin embargo, indicó que el sistema al tomar la próxima factura detectaría el caso que fue inferior al estimado en la factura sobrecargada.
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El sistema de gestión comercial utilizado es denominado Open, se utiliza hace más de 22 años y es una tecnología obsoleta que data de hace 25 años. Por eso culpó al sistema por ser obsoleto a las necesidades actuales, que debería de tener una conectividad a la web. Además, reiteró que las lecturas no se hicieron porque los funcionarios no salieron a recorrer medidor por medidor.
Los beneficiados con las exoneraciones fueron de entre 1.181.000 usuarios en el primer mes, en el segundo llegó a 1.110.000 mientras que en el último se llegó a 1.255.00 usuarios. También aclaró que la lectura con base en la estimación en el mes de marzo se dio al 48,8%, en abril fue para casi el 99,1% de los usuarios, lo que produjo un sobrecosto para la mayoría
Nuevos medidores
Para mejorar el servicio, anunció que está prevista una audiencia pública para dentro de 20 días aproximadamente para exponer ante la ciudadanía un proyecto de inversión en medidores inteligentes para el Área Metropolitana, lo que significaría una inversión de 50 millones de dólares. Los mismos cuentan con una tecnología para realizar telemediciones. Mientras que en un plazo de 5 a 7 años se haría un cambio total de la tecnología en la medición para evitar problemas futuros.
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