La senadora Lilian Samaniego salió al paso de las acusaciones sobre las presuntas sobrefacturaciones en la compra de insumos médicos, que involucran a su familia en plena pandemia del COVID-19. Negó tener vínculo y se excusó con una supuesta guerra de empresarios.
“Esto es una guerra entre empresarios, no es una guerra política, es entre empresarios del sector farmacéutico y se tiene que investigar, llegar a los verdaderos responsables, que son poderosos empresarios. La ciudadanía tiene que saber todo”, dijo la legisladora a Universo 970 AM.
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Sostuvo que los Samaniego nada tienen que ver con la compra o venta de insumos médicos en el marco de la pandemia del COVID-19. A pesar de las denuncias y los documentos, la senadora refirió que el depósito donde se encontraron camas para salud fue alquilado a una empresa desde noviembre del 2019.
Indicó que los medios de comunicación publicaron que la propiedad es de María Nathalia Samaniego, pero supuestamente ella no es la dueña y el vehículo del Ministerio de Salud retiró las camas de otro lugar, un inmueble contiguo al de su sobrina.
“El vehículo del Ministerio de Salud nunca estuvo frente a la propiedad de mi sobrina. No compramos, no vendemos y no tenemos ningún contacto con el proceso que está llevando a cabo el ministerio por la pandemia”, agregó la legisladora del Partido Colorado.
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La senadora insistió en que no tiene ninguna conexión con las camas ni con cualquier otro insumo adquirido por el Ministerio de Salud Pública, y que supuestamente su sobrina María Nathalia Samaniego alquiló desde noviembre del año pasado su depósito a una empresa del rubro farmacéutico.
En New Logistic SA son accionistas Justo Rubén Ferreira y su hija Patricia Beatriz Ferreira, esta última es la proveedora oficial de las camas de oro.
Las camas que se bajaron y ensamblaron en el depósito de María Nathalia Samaniego son del mismo clan Ferreira, ya que la empresa New Logistic SA, al que la señorita citó como inquilina del depósito, tiene como accionistas a Justo Rubén Ferreira, Patricia Beatriz Ferreira y Carlos Alberto Borrell.