Ayer, en el marco de una conferencia de prensa en el Arzobispado de Asunción, el cardenal Adalberto Martínez Flores habló de la muerte del papa Francisco, al tiempo de recordar su trayectoria, sus últimos mensajes y dejar un mensaje de fe y esperanza ante la partida del líder católico.
Confirmó que ya le fue extendida la invitación al colegio de cardenales para participar del cónclave, para lo cual partirá mañana rumbo a Roma, luego del mediodía. Precisó que, si bien está en constante comunicación con representantes del Vaticano, los detalles de las ceremonias como horarios y días aún no le fueron confirmados, pero espera poder compartir con los fieles paraguayos apenas cuente los datos.
El cardenal Adalberto Martínez explicó que si bien conoce el procedimiento a seguir, carece de experiencia, teniendo en cuenta que es la primera vez que Paraguay cuenta con participación en un cónclave, y más aún con la oportunidad de que uno de sus representantes pueda ser elegible.
Además del cardenal Martínez, el otro paraguayo elegible papa es el cardenal Cristóbal López, arzobispo de Rabat y quien es el primer paraguayo en ostentar el rango de cardenal.
Al ser consultado sobre si contaba con alguna idea de quién podría ser el sucesor del papa Francisco, enfatizó que existe un proceso de reflexión y discusión previa que debe darse antes de hablar de posibles candidatos, abogando que indiscutiblemente se debe de analizar el perfil del próximo sumo pontífice según las necesidades de la iglesia y, por supuesto, el trabajo del anterior papa.
En cuanto a la idea de que pueda ser elegible y que el pueblo paraguayo puede llegar a soñar con un papa paraguayo, Martínez fue tajante con la idea de que los cargos no deben ser la meta de un religioso, ya que lo fundamental es poder servir a la iglesia y a su pueblo. “En la Iglesia no existen cargos de jerarquía, de que una jerarquía sea más importante que la otra. Es cierto, estamos acostumbrados a siempre tener un cardenal, pero para la Iglesia lo importante es ser misionero. Yo, por ejemplo, estaba bien como cura de pueblo, obispo de nuestro pueblo; estaba de párroco en la parroquia Sagrado Corazón cuando me llamaron para ocupar el cargo”, comentó Martínez.
Definirán al nuevo sucesor del pontífice
El cardenal Cristóbal López confía en que todos los llamados sean iluminados por la divina providencia.
El fallecimiento del papa Francisco, confirmado ayer por autoridades del Vaticano, ha puesto al mundo entero a hablar de su labor, su legado, su personalidad y, por sobre todo, los pasos que se deberán seguir para la elección de su sucesor.
El cardenal Cristóbal López, en conversación con el programa “Arriba hoy”, de canal GEN y Universo 970 AM/ Nación Media, mencionó que si bien no cuenta con experiencia en el proceso de selección del cual participa el cónclave, puesto que es la primera ocasión en que es parte del grupo de 130 cardenales menores de 80 años que pueden ser elegidos, confía en que todos los llamados sean iluminados por la divina providencia.
“La reunión del cónclave es un proceso de discernimiento. Ya nos han convocado a todos los cardenales a partir de mañana para acercarnos y vivir los próximos días en un compartir donde se verá la visión y el perfil del papa que se necesita”, indicó el cardenal López.
Rearcó que el papa Francisco fue un líder que no solo hablaba, sino que actuaba conforme a sus creencias y lo que suponía era lo correcto para la Iglesia católica y el pueblo en general. Así también sostuvo que la labor de acercamiento realizada por el sumo pontífice, que en diversas ocasiones no solo habló sobre llegar a las periferias, sino que lo hacía con sus viajes y recorridos donde no dejaba ningún lugar atrás.
¿Por qué el papa había adoptado el nombre de Francisco?
El nombre de nacimiento del papa Francisco es Jorge Mario Bergoglio, elegido como el 266.º papa de la Iglesia católica hace más de 12 años, el 13 de marzo de 2013.
Al asumir el pontificado en ese entonces, el papa eligió un nombre que causó sorpresa ya que no había sido utilizado por ningún otro nuncio apostólico en la historia. Bergoglio eligió el nombre de Francisco en honor a San Francisco de Asís, el santo italiano del siglo XIII conocido por su vida de pobreza, humildad y amor por la creación.
Ese 13 de marzo del año 2013, el cónclave que se celebró tras la renuncia de Benedicto XVI eligió como papa a Bergoglio, quien manifestó su voluntad de ser conocido como Francisco en honor al santo de Asís. Bergoglio es el primer papa jesuita y el primero proveniente del hemisferio sur.
A lo largo de su vida pública, el religioso argentino se ha distinguido por su humildad, su énfasis en la misericordia de Dios, su visibilidad internacional como papa, su preocupación por los pobres y su compromiso con el diálogo interreligioso. Bergoglio nació el 17 de diciembre de 1936 en la localidad de Flores, de Buenos Aires (Argentina), y desde su primera aparición pública como nuncio apostólico emocionó a sus feligreses, a quienes pidió: “Recen por mí”.