En Santa María, Misiones, a unos 233 kilómetros de Asunción, se encuentra el Museo Diocesano de Arte Jesuítico, que preserva imágenes talladas en madera por indígenas instruidos por los jesuitas. En estos días santos, el sitio ya ha recibido a cientos de personas y abrirá con normalidad hasta hoy a la espera de visitantes. Cada pieza que se encuentra en el lugar es única y digna de ser admirada.
Al ingresar por la puerta principal, uno se traslada a la época de los jesuitas; el olor a madera impregna el sitio, y las anchas paredes hacen que la frescura permanezca en el interior. En el lugar, uno es recibido por Irma Ramírez, quien brinda instrucciones para el ingreso, y luego son guiados por Lelis Martínez, historiadora, que va explicando cada pieza a los visitantes.
Una de las piezas más importantes del museo es el Cristo crucificado, que se encuentra junto a las tres Marías y San Juan. En este lugar se albergan casi 60 piezas, todas talladas en madera por manos indígenas. Además, se preservan algunos pedazos, muebles y atributos, llegando a 70 piezas en total.
“Este año recibimos menor cantidad de personas; por ejemplo, el año pasado recibimos a grupos de entre 30 a 40 personas y este año se redujo entre 10 a 15. Tenemos disponible a tres guías que acompañan a los grupos. Creemos que la población ya no está interesada en visitar los museos como antes”, detalló Ramírez, en entrevista con La Nación/Nación Media.
Por su parte, Lelis explicó que todo el espacio data de mediados del siglo XVII y las esculturas son íntegramente de indígenas guaraníes. “Desde hoy comenzaron a venir personas, y la verdad es que no hay mucha participación comparando con años anteriores; es un número muy disminuido. La parte religiosa se va dejando de lado y se inclinan más por lo turístico”, puntualizó.
Entre las obras destacan la del fundador de la compañía, San Ignacio de Loyola, María Magdalena, San Sebastián, la Virgen de los Dolores, San Estanislao de Kostka, San Luis Gonzaga y San Pedro. Cada pieza tallada contiene, al pie, la descripción de la historia del santo. Para ingresar al museo se debe abonar G. 20.000.