Denunciaron a los padres ante la Codeni por falta de deber al cuidado.
Durante el feriado del 1 de enero, en el Hospital Regional de Encarnación los médicos atendieron a un niño de 8 años que llegó herido luego de que un explosivo le estallara en la mano. Los especialistas tuvieron que realizarle una cirugía de emergencia, donde le amputaron parte del dedo anular. Los padres fueron denunciados ante las instituciones pertinentes.
El doctor Jorge Ayala, director del hospital, explicó que todo el mes de diciembre de 2024 realizaron fuertes campañas sobre pirotecnia cero y que durante la jornada de ayer atendieron a un niño al que le tuvieron que amputar parte de un dedo. El paciente se encuentra estable tras la intervención.
“Se trata de un niño de 8 años, que ingresó debido a la manipulación de pirotecnia que tuvo como consecuencia la pérdida de parte del cuarto dedo de la mano derecha. Lamentamos profundamente este suceso”, explicó el doctor, en entrevista con la corresponsal de Nación Media.
Resaltó que el paciente se encuentra internado recibiendo medicación y seguirá estrictos controles para evitar alguna posible infección que podría afectar incluso a la mano afectada. Tras la explosión de un petardo, los pacientes se exponen a: infección ósea, pérdida de fuerza, alteración de la función, entre otros.