Diciembre es un mes caracterizado por el gran movimiento que existen en los aeropuertos del país, pero principalmente en el Silvio Pettirossi, donde las postales de reencuentros entre madres, padres, hijos, abuelos y familias enteras son una constante faltando días para la Navidad y Año Nuevo.
El titular de la Dirección Nacional de Aeronáutica, Rubén Aguilar, confirmó ayer que estamos en temporada alta en cuanto a retornos de paraguayos que vienen al país a pasar la Nochebuena y el Año Nuevo con la familia. Unas 3.570 personas pasan por día por la terminal aérea este diciembre, cifra que las autoridades esperan continúe en ascenso de manera escalonada conforme se acerquen las principales fechas festivas.
Abrazos efusivos, envueltos en llanto ante no solo la felicidad de volver a ver a un ser amado, sino que también la seguridad de tenerlos de vuelta cerca para disfrutar de esa tan esperada compañía. Semanas, meses y hasta años, en algunos casos, pasaron esperando el reencuentro.
Ayer se vio a muchas familias aguardando el arribo del avión que trae al ser querido desde España, donde se encuentra una importante cantidad de paraguayos. Un momento muy emotivo protagonizó una mujer que al encontrarse con su madre se puso de rodillas y con sus manos juntas le pidió la bendición.
Carteles, globos, flores, todo presente es válido en medio de la emoción de la bienvenida y el reencuentro. Frases como “Bienvenido”, “Te extrañamos”, “Llegó la hora de regresar, papi”, fueron las más vistas en el aeropuerto internacional.
El mosaico de abrazos en cadena inunda el aire festivo y esperanzador de manera ininterrumpida conforme van llegando los vuelos que traen a compatriotas de países como España, Estados Unidos, Brasil y Argentina.
AYER LLEGÓ VUELO CON 350 PASAJEROS
“La gente está llegando ya en cantidad importante considerando las fiestas y esto va en aumento, teníamos 3.300 pasajeros diarios, y ahora ya estamos superando 3.600 por día”, explicó Rubén Aguilar, en una entrevista con el canal GEN/Nación Media.
Detalló que el vuelo procedente de Madrid, en el que se congregan personas de otras ciudades europeas, es el que más cargado llega. En el de ayer llegaron 348 compatriotas.
En conversación con algunos de los familiares que aguardaban ansiosos salieron a flote diferentes historias, entre ellas, madres esperando a sus hijos, sobrinas a sus tías y abuelas expectantes de ver a sus nietos.
Algunos fueron a España a trabajar y regresan cada fin de año, otros vuelven después de ocho años, también están quienes fueron para estudiar. “No existe mejor viaje que el de regreso a casa”, decía uno de los carteles de bienvenida. Se espera que el flujo de pasajeros continúe incesante hasta el 23 o 24 de diciembre.