Marcando el inicio del Encuentro Latinoamericano de Responsables Nacionales de la Pastoral Juvenil, jóvenes de toda América Latina y el Caribe realizaron ayer domingo una peregrinación desde el Seminario Metropolitano hacia la Catedral Metropolitana, marcando el inicio del XXI Encuentro Latinoamericano de Responsables Nacionales de la Pastoral Juvenil.
Con banderas de diferentes países y corazones llenos de fe, se unieron para celebrar su unidad en Cristo. Después de 5 años (2019) vuelven a reunirse, por segunda vez en Paraguay, según anunciaba Bianco Prieto, coordinador de los Jóvenes por Paraguay. “El último encuentro se realizó en Perú en 2019, y después de un largo suspenso, este año volvemos a realizar este encuentro de los responsables de las pastorales juveniles, por segunda vez en Paraguay”, recordó.
Por su parte, el cardenal Adalberto Martínez Flores, en su homilía en la Catedral Metropolitana, dijo a los participantes: Con el lema “A ti te hablo, ¡levántate!’”, iniciamos este Vigésimo Primer Encuentro Latinoamericano de responsables nacionales de Pastoral de Juventud. Gracias por haber escogido al Paraguay para encontrarse, rezar, reflexionar y vivenciar un acercamiento a las múltiples y complejas realidades de nuestra América Latina y el Caribe y desde las energías e ideales propios de la juventud puedan contribuir para impulsar un modo de ser Iglesia en salida misionera, sinodal, samaritana, de puertas abiertas, para llevar a todos la alegría del Evangelio, aun y en medio de nuestras necesidades y precariedades.
“Ustedes, queridos jóvenes, serán los artesanos del amor. La Iglesia y la sociedad necesitan de su capacidad de amar y de tejer relaciones de amistad social y de fraternidad, camino ineludible para la paz social y para la construcción de una sociedad conforme a los valores del reino de Dios, promoviendo el respeto irrestricto a la dignidad de la persona humana para que nadie se vea privado de tener las condiciones para una vida digna y plena”.
Agregó que el encuentro se enmarca en el proceso sinodal que vive toda la Iglesia. Para que sea fructífero y logre sus objetivos, la Iglesia nos propone el método de la conversación espiritual, que invita a la capacidad de escucha y acogida al otro. Esto significa saber escucharse con un corazón abierto y receptivo. Esta cualidad de atención es un acto de respeto, acogida y hospitalidad hacia los demás tal y como son.
“Estamos en el año de la oración camino al Jubileo de la Esperanza en el próximo año 2025. La oración está en el centro de nuestra acción apostólica. Una práctica de oración personal y comunitaria, con la ayuda del Espíritu Santo, nos permitirá el discernimiento necesario para escuchar y conocer la Voluntad del Padre que, por medio de Jesucristo, nos invita hoy y siempre: “Joven, a ti te digo, ¡levántate! Invoquen con confianza al Espíritu Santo para que les conceda sus dones, les ilumine y les guíe en estos días de encuentro. Que María Santísima, madre de los jóvenes, los acompañe y les proteja”.
PROGRAMA
El programa de la semana está repleto de actividades diseñadas para promover el intercambio, el aprendizaje y el crecimiento espiritual. Hoy 16 de julio visitarán y participarán de un acto simbólico en el monumento a Ykua Bolaños, seguido de una celebración de la diversidad cultural. El viernes 19 de julio se oficiará una misa de clausura en la Basílica de Caacupé, a las 16:00.
Además, durante la semana se llevarán a cabo talleres, paneles de discusión y momentos de oración y celebración que permitirán a los participantes reflexionar sobre la realidad actual de los jóvenes y discernir juntos acciones para fortalecer la pastoral juvenil en el continente.