En la jornada de ayer martes 2 de julio, la Policía Nacional recibió unas 2.000 armas que fueron confiscadas durante el operativo Dakovo, ocasión en que fue desarticulada una organización criminal internacional. Con esta acción, las mismas ahora pasarán a engrosar el equipamiento de las fuerzas se seguridad, además el Gobierno tiene previsto invertir en equipo para los agentes del orden.
En ese sentido, el comisario general Carlos Benítez, comandante de la Policía Nacional, destacó que el armamento recibido es parte de las inversiones previstas y el fortalecimiento de la fuerza para los próximos tres años.
Así también, informó que se tiene previsto invertir 92 millones de dólares para la adquisición de equipamiento, móviles, tecnología y logística, ya que a partir de este año se aguarda la incorporación de unos 5.000 nuevos agentes del orden que reforzarán las filas policiales para los que se precisará equipamiento para cumplir con sus labores además de recibir los beneficios que estipula la Carta Orgánica de la Policía.
El presidente de la República, Santiago Peña, en su informe de gestión presentado al Congreso, había acentuado los importantes logros contra el crimen organizado desde agosto de 2023, que ocasionaron un perjuicio de unos 180 millones de dólares a las facciones criminales. Uno de esos golpes fue justamente el operativo Dakovo, que desarticuló mediante 22 allanamientos una organización delictiva que enviaba armamentos a bandas de criminales de Brasil. Por este operativo fueron detenidos exmilitares, militares en ejercicio y exdirectores de la Dirección de Material Bélico (Dimabel).